Diario de León

Mutola consiguió en Budapest su sexto entorchado mundial indoor

La mozambiqueña se impuso en la final de 800 mientras que Olsson igualó su plusmarca en triple

Felicien, a la derecha, superó en la final de los 100 vallas a Gail Devers

Felicien, a la derecha, superó en la final de los 100 vallas a Gail Devers

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José Antonio Diego - budapest
León

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La mozambiqueña María Lourdes Mutola, campeona mundial y olímpica de 800 metros, consiguió en Budapest su sexto título mundial en pista cubierta, algo que ningún atleta, hombre o mujer, había conseguido jamás, y el sueco Christian Olsson igualó el de triple. Rusia apabulló al equipo estadounidense en el cuadro de medallas: le dobló en oros, con 8, le aventajó en platas (seis por cinco) y le quintuplicó en bronces (cinco por uno). La final de 800 discurrió al ritmo impuesto por la eslovena Jolanda Ceplak, que hizo 700 metros en cabeza. Mutola esperó a la última curva para pasarla y venció con 1:58.50. Ceplak llegó 22 centésimas después y la británica Fenn completó el podio. En la carrera masculina de 800 el brasileño Osmar Barbosa dos Santos hizo todo el gasto al principio y recogió el fruto en forma de medalla de bronce. Venció el sudafricano Mbulaeni Mulaudzi, el más rápido al final, y le siguió Rashid Ramzi, de Bahrain. Christian Olsson igualó con un registro de 17,83 metros el récord mundial de triple en sala que el cubano Aliecer Urrutia estableció el 1 de marzo de 1997. Sólo el gigante brasileño Gregorio, de dos metros de estatura, se le acercó al sueco. El relevo ruso, excepcional El último récord mundial lo puso el cuarteto ruso de relevos 4x400 con un triunfo en 3:23.88 que mejora en casi dos segundos el anterior del propio equipo ruso (3:24.25). La canadiense Perdita Felicien, de 23 años, campeona mundial de 100 m.vallas en París'03, evitó con su victoria en los 60 m.vallas que Gail Devers lograra un doblete histórico bajo techo. La canadiense venció con la mejor marca de los campeonatos (7.75), tres centésimas por delante de Gail y siete de la francesa Linda Ferga. Tatyana Lebedeva, en cambio, sí dobló oros en Budapest. El sábado igualó, en su primer salto, el récord mundial de triple con 15,16 y después lo batió dos veces. Era su tercera medalla de oro bajo techo. Un día después fue en busca de más oro, ahora en longitud. En dos saltos sentenció la contienda. Empezó con 6,89 y continuó con 6,98. La heptatleta Carolina Kluft (6,92 en su segundo) y la rusa Tatyana Kotova (6,93 en el quinto) apremiaron a Lebedeva, pero la primera se lesionó y abandonó la pista en camilla. El duelo ruso de Tatyanas se decantó del lado de Lebedeva. Rusia, como en 200 y en 400, ganaba a pares las medallas. Etiopía consiguió el doblete en 3.000 pero hubo cambio generacional. Meseret Defar, de 20 años, arrebató la corona a Berhane Adere.

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