Se apagó la «galaxia»

Adiós a seis temporadas de un modelo odiado, envidiado, criticado y admirado. La «galaxia» blanca se ha apagado de forma definitiva. El último representante de los famosos «Zidanes y Pavones» abandona el Real Madrid con rumbo a Italia. Ronaldo viajó este jueves a Milán para firmar con el equipo que preside Silvio Berlusconi, que pagará seis millones por el delantero brasileño. En la ecuación no entra Ricardo Oliveira, ya que su compatriota no puede disputar las eliminatorias de la Champions. Una contratación supeditada a la revisión médica de la maltrecha rodilla de Ronaldo y que ha iluminado la cara de Fabio Capello. El trato entre el delantero y el entrenador ha sido como el tiempo, frío, por no decir congelado. El distanciamiento comenzó con el fichaje de Ruud van Nistelrooy; continuó con la colocación en el mercado del brasileño y prosiguió con el debate sobre el peso de Ronaldo, que se convirtió en un asunto de telerrealidad. Con el nuevo año, Capello se sintió respaldado para hacer su particular lista negra y puso una cruz sobre Beckham, Cassano y Ronaldo. El inglés se ha buscado las habichuelas en Estados Unidos, el italiano no se quiere mover y Ronaldo buscó cobijo en una ciudad que le encanta. El Milan se ha aprovechado de las ganas que tenía el club blanco de quitárselo de encima. En el estío, ofreció 20 millones por el jugador. Entonces, al presidente Ramón Calderón le pareció una cantidad «ridícula» para un futbolista de categoría mundial. Ahora, seis millones son una bendición para mantener la calma en el vestuario y, sobre todo, en la grada. Nada a cambio La recuperación de la lesión de rodilla, su falta de preparación física -Capello dijo que cuando pareciera un futbolista, jugaría- y la llegada de Higuaín, le han condenado a buscarse equipo. Además, los números de Ronaldo esta temporada son muy discretos. Sólo ha jugado siete partidos de Liga, donde ha marcado un gol, y dos de Copa (otro tanto). Gracias a sus goles, el Madrid ganó su último campeonato doméstico. Además, ha alzado una Intercontinental, aunque ha fracasado en la Copa de Europa, su gran sueño. No obstante, en el recuerdo quedarán los tres goles que marcó al Manchester United en Old Trafford el 23 de abril de 2003. Ronaldo firmará por lo que resta de temporada y una más. No podrá jugar con la camiseta rossonera en Liga de Campeones, tras disputar cuatro partidos (dos goles) con el Madrid. La marcha de Ronaldo acaba con el sueño hecho realidad de Florentino Pérez. Se empeñó en traer a los mejores atacantes del mundo, a los jugadores que más camisetas vendían y que podían reflotar la maltrecha mercadotecnia del club. Lo consiguió, aunque abandonó el barco antes de tiempo. Pérez desembolsó unos 207 millones de euros por Figo (60), Zidane (72), Ronaldo (45) y Beckham (unos 30). Sin embargo, entre el anterior presidente blanco y el actual, el Madrid sólo ha recuperado una cantidad ridícula, el 2,89% de lo invertido. Presidencia de la Uefa en juego Por otra parte, Lennart Johansson, representante del continuismo respaldado por las grandes potencias, y Michel Platini, adalid del cambio, se juegan este viernes la presidencia de la Uefa en las elecciones que se celebrarán en Dusseldorf.