Un terremoto de siete grados en Japón deja sólo algunos heridos

Un fuerte terremoto sacudió ayer por la mañana el norte de Japón, cerca de la ciudad de Sendai. El temblor -de siete grados de intensidad en la escala Richter- se sintió también en la capital japonesa, Tokio, situada a más de trescientos kilómetros al sur del epicentro del seísmo. El temblor duró alrededor de un minuto e hizo oscilar a las edificaciones, pero no causó daños en las centrales nucleares de Ibaraki, Miyagi y Fukushima, que operan con normalidad. Sendai, la ciudad más afectada -en la que se ha producido algún incendio- tiene poco más de un millón de habitantes, en su mayoría dedicados a la agricultura, y es la ciudad más importante de la región de Touhoku, situada al noroeste del país. Según la televisión pública NHK que cortó su programación habitual para dar información puntal y continua del terremoto, la policía y los bomberos tuvieron que atender tan sólo a tres heridos en Iwate, además de otro herido y varios atrapados en el interior de un ascensor en la provincia de Miyagi. En Ichinoseki se registró un incendio, y en una extensa zona de Esashi se cortó el fluido elèctrico. El terremoto de mayor intensidad que ha sufrido Japón en los últimos dos años afectó parcialmente al servicio ferroviario -los trenes bala que circulan en el noroeste del país han suspendido sus viajes- mientras en Tokio, los edificios han sufrido fuertes sacudidas pero la actividad en las calles siguió con normalidad. El yen sufrió un bajón en los mercados internacionales de divisas tras divulgarse la noticia del terremoto, que se conoció justo después de que cerrase la bolsa de Tokio.