HARRIET HARMAN
El triunfo de una superviviente política

La carrera política de Harriet Harman ha sido muy difícil
La proclamación de Harriet Harman como nueva «número dos» del laborismo británico, imponiéndose a otros candidatos que partían como favoritos, es el triunfo de una superviviente política. Casada con Jack Dromey, el tesorero de la formación y líder sindical, Harman -de 56 años y abogada de profesión- es partidaria del proyecto del Nuevo Laborismo desde su inicio y está considerada próxima tanto a Tony Blair como a Gordon Brown. Pero su carrera política ha estado lejos de ser una balsa de aceite. Ya antes de la llegada de los laboristas al poder en 1997, Harman se vio envuelta en una polémica cuando era portavoz de Sanidad, tras ser criticada por llevar a su hijo a una escuela con criterios selectivos de ingreso, algo a lo que se oponía su formación. Blair le dio entonces su respaldo y, cuando los laboristas ganaron las elecciones, Harman fue ministra de Seguridad Social de su primer Gobierno. Las malas relaciones entre Harman y su segundo, Frank Field, incluso con desacuerdos públicos, contribuyeron aún más a dañar su imagen, por lo que el primer ministro decidió prescindir de ella en la primera remodelación de su Ejecutivo en 1998. Diputada desde 1983, Harman regresó al Gobierno en 2001 y no es la primera vez que está a la sombra de Brown. Harman, que se convertirá también en la nueva presidenta del partido en sustitución de Hazel Blears, ha sido elegida tras una reñida votación en la que resultó la preferida entre los miembros de la formación, la segunda más popular entre los diputados y eurodiputados, pero la quinta entre los afiliados a los sindicatos.