Demandas que no se quedan en zonas verdes y pequeñas obras
El campus de Vegazana tiene muchas deficiencias. Y por eso desde el Rectorado se insiste en que es necesario solucionarlas porque la zona universitaria es en buena medida la imagen de la ciudad para miles de estudiantes y visitantes.
Entre ellas, la Oficina Verde señala algunas como los aparcabicis, que tienen 20 años y necesitan ser renovados. O las zonas de aparcamiento, a veces no definidas, como en las cercanías de la cafetería.
El control del tráfico es otro aspecto que preocupa a la Universidad por la gran cantidad de estudiantes que atraviesan calles cada vez con más coches. O la falta de seguridad en algunas zonas, como el Hospital Veterinario o el pabellón de deportes.
También, la Oficina Verde destaca en su informe la necesidad de poner barandillas en escaleras o medidas de accesibilidad.
El campus de Vegazana acoge la mayoría de los centros universitarios de la ULE. La construcción del PAU de la Universidad, donde se levantan ya grandes bloques de pisos, ha limitado su crecimiento hacia la ciudad, aunque a cambio haya generado cuantiosos beneficios para las arcas académicas.
Su futuro pasa por ‘saltar’ la Ronda Este a terrenos del municipio de Villaquilambre. Su Ayuntamiento es receptivo y así consta ya en el Plan General de Ordenación Urbana. El mayor hándicap, como en todo, es el dinero. No hay para construir nuevas facultades y empezar las obras de urbanización. De momento.