El PP promete que neutralizará la subida del IBI con la bajada del tipo

Lo intocable son los 51 millones de euros puestos al cobro para el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) este año. Una cifra «por debajo de la que no puede quedar la recaudación, como queda comprometido en el plan de ajuste» que debe validar el Ministerio de Hacienda para la refinanciación de los 174 millones suscritos con el ICO, según explica el concejal de Hacienda, Agustín Rajoy. El único límite que existe, como abunda el edil del PP, que compromete que la subida que se produzca por la nueva valoración catastral quedará neutralizada por «una bajada del tipo impositivo». «Nosotros tenemos que recaudar ese dinero, así que si sube el recibo por los nuevos valores catastrales fijados por el Catastro lo que haremos será bajar el tipo impositivo para que no se note la incidencia», resuelve, con el horizonte fijado en 2016.

Para entonces será otra corporación municipal quien tenga que decidir, aunque siempre con la obligación de que no se reduzca la recaudación del IBI. Una premisa en la que además incidirá él hecho de que justo en 2016 finaliza la obligación estatal del incremento del IBI un 10%, lo que hará que vuelva a bajar el tipo impositivo al 0,79%, en lugar de mantenerse en el 0,87% actual, o que incluso se puedan contemplar más rebajas.

Pero por encima de estas cuentas, el concejal de Hacienda incide en que además habrá que contar con «la recaudación que provenga de las bolsas de fraude que afloren con la regularización catastral que comenzará a hacerse el próximo mes». Un procedimiento de ‘amnistía catastral’ ordenado por el Gobierno que permitirá que quienes tengan inmuebles sin declarar o que hayan hecho alteraciones en ellos, como ampliaciones de superficie, puedan resolverlo con el pago de una tasa de 60 euros, además del impuesto correspondiente desde la fecha de variación, con un máximo de cuatro años. «Ese dinero que ahora no recaudamos está por encima de los 51 millones fijados, por lo que con ese margen se puede contar para que los contribuyentes tengan que pagar por el IBI incluso menos de lo que abonan ahora», avanza Rajoy.

Más allá de estos efectos, el concejal de Hacienda defiende que la nueva valoración catastral solicitada por el Ayuntamiento —la ponencia anterior es de 1996 y se debería actualizar cada 10 años— busca «una mayor equidad» en el pago del IBI de los contribuyentes. «Hay zonas en las que la valoración catastral está muy por encima del 50% que marca la normativa, mientras que en otras se mantiene alrededor del 43%», explica Rajoy, quien apunta como ejemplo de las primeras «las pedanías de Trobajo del Cerecedo, Oteruelo y Armunia y el barrio de Puente Castro, en los que las recalificaciones hicieron que subiera de manera desproporcionada el recibo» y a partir de la renovación «verán cómo baja». Una disminución que también afectará a las últimas áreas de construcción, como La Lastra o La Torre, en las que la valoración corresponde a la época del boom inmobiliario. Por contra, en el resto del municipio, en el que se inscriben la mayoría de las 130.509 unidades urbanas, la variación se notará al alza. Un aumento de hasta el 16% que el PP promete neutralizar con la bajada del tipo impositivo.