DECISIONES MUNICIPALES
El Ayuntamiento de León cierra las piscinas antes de que finalice el verano y en plena ola de calor
Sólo deja abiertas las instalaciones del Hispánico hasta que empeore el tiempo
La piscina de Sáenz de Miera, clausurada
La política de austeridad ha terminado incluso con las principales piscinas municipales de verano, el único atractivo estival con el que cuenta la ciudad. El Ayuntamiento de León ha decidido cerrar las instalaciones de Sáenz de Miera y de la Palomera desde el pasado domingo y dejar abiertas temporalmente las del Hispánico. El cierre se produce veinte días antes de que acabe el verano y en unos días con condiciones meteorológicas más que aceptables, sobre todo después de atravesar un verano fresco y poco atractivo para las jornadas piscineras.
Fuentes municipales confirmaron ayer el cierre, que tiene su excepción en el Hispánico. Estas instalaciones situadas en el entorno de la plaza de toros seguirán activas hasta que pase el buen tiempo, según indicaron las mismas fuentes.
El Ayuntamiento no ha hecho todavía balance respecto al número de usuarios que han pasado este año por las piscinas, pero la reducción del número de días con sol durante el presente verano vaticina unos resultados moderados. El pasado año, a fecha 20 de agosto habían pasado por las tres piscinas muncipales de León 60.000 usuarios que habían dejado una recaudación de 130.000 euros. El anterior año, el mes de agosto se había cerrado con 72.000 entradas vendidas.
La Concejalía de Deportes de León ya tomó la misma decisión en 2013, escudada en los recortes y en los inflexibles contratos del personal que requieren las instalaciones municipales para su mantenimiento, limitados a los meses de julio y agosto más los últimos días de junio, coincidiendo con las fiestas patronales de la ciudad. Una treintena de personas han trabajado durante este periodo como socorristas, vigilantes, personal de mantenimiento o de limpieza.