BANCOS
Unicaja y Liberbank negocian su unión para constituir el sexto banco del país
Las dos entidades tienen una implantación territorial complementaria y fortalecerían su negocio
Un cajero de Liberbank.
Unicaja Banco y Liberbank reconocieron ayer, a través de dos Hechos Relevantes enviados a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), que están negociando de cara a fusionar las entidades, lo que fortalecería su posición y crearía el sexto banco del país por activos. Unicaja señala en su comunicación que «de forma regular analiza potenciales oportunidades de inversión u operaciones corporativas que pudieran resultar de interés para todos sus accionistas», y «confirma contactos preliminares con Liberbank, con conocimiento del consejo de administración», aunque de momento no se ha tomado ninguna decisión.
Por su parte Liberbank admite que «en el marco del estudio habitual de posibles operaciones estratégicas, confirma contactos con Unicaja, con conocimiento del consejo de administración, para analizar eventuales oportunidades entre ambas entidades». Aunque apunta su «carácter preliminar».
Con estas negociaciones se inicia una nueva, y esperada, ronda de concentraciones en el sistema bancario español, que tiene como objetivo fortalecer fundamentalmente a las entidades resultantes de las antiguas cajas de ahorro (Unicaja concluyó recientemente el proceso de absorción de Banco Ceiss, la antigua Caja España).
La previsión es que la fusión se produzca mediante una absorción de Liberbank, que tiene 39.131 millones de euros en activos, por parte de Unicaja, que cuenta con 57.309 millones. El banco resultante sería el sexto en volumen del país, y sumaría 1.866 oficinas y 10.849 empleados.
Unicaja tiene presencia fundamentalmente en Andalucía y en Castilla y León, donde quedó reducida la actividad de Ceiss tras el plan de saneamiento. Unicaja nació de la unión de las cajas de Ronda, Cádiz, Almería, Málaga, Antequera y Jaén.
Por su parte Liberbank es el resultado de la unión de Cajastur, Caja de Extremadura, Caja Castilla-La Mancha y Caja Cantabrica, por lo que tiene especial presencia en Asturias y Cantabria, Extremadura y Castilla-La Mancha.
Esta distribución territorial hace que ambas entidades se complementen, y puedan ganar escala y ahorrar costes sin duplicidades en las zonas de implantación.
Hasta septiembre Unicaja tuvo un beneficio neto de 142 millones, y Liberbank de 108 millones.