Los vecinos de La Palomera exigen más stops y menos velocidad

Durante los meses estivales las asociaciones de vecinos alzan sus voces para que el Ayuntamiento no olvide sus reivindicaciones. En el caso del Ceas de la Palomera- Quinilla, su presidente, Eleuterio Robles, hace énfasis en la necesidad de mejorar la señalización de tráfico de la zona. Consideran importante establecer un badén para frenar la velocidad de los coches que llegan desde la calle Jorge de Montemayor y pintar señales de Stop en el suelo. El exceso de kilómetros por hora es una de las principales preocupaciones de los vecinos ya que, al tratarse de un barrio en el que vive un gran número de parejas jóvenes, hay muchos niños que juegan en la calle. No es la primera vez que realizan esta petición. En el mes de mayo ya le manifestaron esta necesidad al alcalde. La casualidad quiso que al día siguiente tuviera lugar un accidente de tráfico entre un turismo y un taxi en el que resultó herida de gravedad una anciana que, tras unos meses de hospitalización, murió. Mejor señalización No es un hecho aislado sino que, según el presidente de la asociación, «es frecuente que en estas calles haya unos dos o tres accidentes por semana». Además, consideran insuficiente la señalización horizontal de los pasos de peatones, es decir, su indicación a través de solamente un paso cebra. Quieren que haya también una señalización vertical de la misma para que los coches la vean mejor y, de esta manera, se respeten. En esta línea, exigen pasos de peatones en la Avenida de la Universidad. Es una calle utilizada por muchas personas ya que a un lado se encuentran instalaciones deportivas y los colegios de la Torre y La Palomera. A pesar de ello, no existen pasos de cebra que les permitan cruzar a los viandantes. Desde el punto de vista de Antonio González, secretario de la asociación de vecinos, «el peatón tiene que ser el rey de la ciudad, no el vehículo». El presidente dice al respecto que «hay que favorecer el tránsito de peatones en detrimento de los conductores para que no rodeen y puedan cruzar con más facilidad». Servicio de urgencias Uno de los puntos clave de sus peticiones es el establecimiento de un servicio de urgencias en el Centro de Salud de la Palomera para evitar que los pacientes graves tengan que desplazarse hasta José Aguado. La respuesta del equipo local de gobierno, según la asociación, ha sido que la distancia media de cada ciudadano leonés a un centro de urgencias es de 9 kilómetros y en el caso de La Palomera es de sólo tres. Pero para los vecinos de este barrio esta cifra no es válida ya que, según ellos, la densidad de población es mucho más alta que en la mayoría de los pueblos de la provincia y, en consecuencia, el número de pacientes potenciales es mucho más elevado. Esta asociación fue creada hace siete años y cuenta con tan sólo 60 socios a pesar de que en el barrio hay 3.500 habitantes. La directiva de la misma se queja de la poca implicación de los vecinos a pesar de sus esfuerzos por llamar la atención vecinal a través de mesas redondas sobre materias como las antenas de telefonía móvil o actividades como degustaciones de paella. «El peatón tiene que ser el rey de la ciudad, no el vehículo» ANTONIO GONZÁLEZ Secreatario de la asociación «El problema de la velocidad es general, por eso hay tantos accidentes en esta zona» ELEUTERIO ROBLES Presidente de la asociación