Los exmineros destapan las condiciones precarias de las recolocaciones del Gobierno

Los trabajadores excedentes de la minería recolocados en las explotaciones mineras de Cerredo y Tormaleo por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco) se quejan de las precarias condiciones laborales y el incumplimiento de lo acordado con la empresa Tragsa Asturias, quien está llevando a cabo los trabajos de restauración en estas explotaciones.

Los afectados, en su mayoría procedentes de la comarca de Laciana explican que la empresa no les ha proporcionado ropa de trabajo adecuada para la época invernal y que, además, les obligan a trabajar en días festivos. «Pero no los pagan como tal ni tampoco se descansa otro día», añaden los exmineros, que denuncian que Tragsa les debe 8 meses del ‘plus de altura’, que consiste en un incentivo por trabajar a más de 1.400 metros. «Es un derecho —aseguran— que actualmente pagan gracias a algunos trabajadores».

Entre las quejas que acumulan los trabajadores, señalan la empresa no les proporciona transporte desde Laciana hasta el lugar de trabajo por lo que deben desplazarse con sus vehículos privados. Añaden que no les pagan el kilometraje y que se ven obligados a circular por carreteras de montaña, transitando por un puerto que en estas fechas se encuentra en malas condiciones debido a la nieve y las heladas. Una vez en Cerredo, la empresa sí les pone transporte hasta Tormaleo, añaden los afectados.

Otra de las cuestiones que denuncian se refiere al impago de las horas extras. En concreto, los operarios señalan que durante el año pasado, han realizado más de 100 horas extraordinarias, pero que la empresa Tragsa Asturias no las ha abonado. «Tenemos que hacer 1.620 horas al año y el resto son extras», afirman los exmineros, que critican también que la empresa también les deniega los tres días correspondientes para asuntos propios.

De hecho, aseguran que ha habido obreros que han abandonado las labores «debido a las condiciones laborales» y que, en opinión de los denunciantes, Tragsa Asturias «no ve con buenos ojos que en esa zona haya gente de Laciana».

Llegan incluso a denunciar que «la empresa piensa que tenemos que estar agradecidos por darnos un puesto de trabajo», y aunque están contentos por poder tener un trabajo también defienden que las condiciones laborales hay que cumplirlas «algo que ahora no está pasando».

Este grupo afirma que esta situación se circunscribe a estas restauraciones en concreto, las realizadas en el Principado de Asturias, pero manifiestan sus dudas acerca de que las administraciones superiores sepan en qué condiciones se están trabajando. Añaden que existen una gran diferencia en las condiciones con las que se dan en la vertiente leonesa, en donde Tragsa León «trata a sus trabajadores como tiene que ser», cumpliendo las condiciones laborales que se prometieron, así como pagando lo acordado a los trabajadores. «Lo llevan todo al dedillo y no hay problemas en la zona del Bierzo», añaden.

Estos trabajos de restauración fueron encomendados por el ministerio a la empresa Tragsa para las explotaciones a cielo abierto derivadas de la concesión directa de ayudas a zonas afectadas por la transición justa en el marco del Plan de Recuperación.