Astorga y La Bañeza cuentan con más oferta comercial que Villaquilambre pese a tener menos población
Casi 6.000 leoneses no tienen acceso a ningún comercio en su término municipal
La Junta considera «imprescindible» el apoyo público para que resistan los negocios rurales
Editorial: Una cuestión de servicios esenciales
Un comercio cerrado en una localidad de León.
Casi 6.000 leoneses residen en municipios donde no existe ningún establecimiento comercial en todo el término municipal y otras 15.400 personas solo tienen a su alcance uno o dos comercios. Son los datos que recoge la Junta de Castilla y León en la Estrategia de Comercio Minorista y Rural de Castilla y León 2024-2027, una planificación que prevé 122 millones de euros de inversión, diseñada precisamente para combatir esta precariedad vinculada directamente con la despoblabión, y a la que se resisten aún a sucumbir las cabeceras de comarca, las zonas turísticas y los entornos de los grandes núcleos de población.
En este documento, se remarca que el apoyo público es «imprescindible» para mantener la competitividad de los establecimientos comerciales en el medio rural, un escenario que se debe someter a un «proceso de reconversión y diversificación» para promover, entre otras medidas, la entrega a domicilio dirigida a la población con dificultades de movilidad o «implantando iniciativas innovadoras que surtan efecto en aquellos municipios sin oferta comercial».
Número de comercios por municipio.
La estrategia establece un baremo municipal por categorías en función del número de comercios, entre la categoría 1 —referida a los municipios sin comercio alguno— y la categoría 6 —en la que se agrupa a los 11 núcleos de población de León, en los que residente más de 270.500 personas, y que cuentan con más de 50 establecimientos comerciales—. En este último grupo se encuentran las capitales de provincia y los municipios de más de 20.000 habitantes —Ponferrada y San Andrés del Rabanedo— pero también otros como Astorga y La Bañeza, cuyo dinamismo comercial y su condición de cabeceras de comarcas importantes les hace estar en cabeza de este ránking.
Refuerzo a los municipios de menos de 1.000 habitantes
Sus objetivos son establecer una clasificación de la situación territorial del comercio rural a nivel provincial para determinar actuaciones en función de los déficits que se detecten y desarrollar líneas de subvención destinadas a estos comercios. El documento hace especial incidencia en analizar la importancia de los municipios cabecera de comarca y también la de aquellos «que puedan aspirar a serlo», con su papel como tractores de estos servicios. Otro frente evaluará cuál es el tipo de actividad más decisiva según el tamaño de los municipios, así como «conocer las problemáticas de las pymes comerciales en su entorno, sus necesidades y los problemas directamente relacionados con su gestión diaria». Además también abordará la situación del comercio ambulante y los productos que vende.
En cuanto a las medidas, prioriza la puesta en marcha de subvenciones para promover la comercialización y garantizar el abastecimiento en los municipios de menos de 1.000 habitantes, incluida la diversificación de los negocios para ampliar la oferta.
También enfoca su esfuerzos en el transporte a la demanda, ya que, según afirma el documento, un 40% de los desplazamienots que se realizan son para compras en el pequeño comercio de las localidades de destino.
Sin embargo, no está incluido aquí Villaquilambre, el cuarto ayuntamiento más grande de León que, con 18.597 habitantes, solo cuenta con 46 comercios, dato que puede explicarse por su cercanía a la capital. Por ello, Villaquilambre forma parte de la quinta categoría, que engrosan otros 23 municipios y que cubren en total las necesidades de más de 83.000 ciudadanos. La cuarta categoría incluye a los territorios con entre 6 y 20 establecimientos y que cumplen 44 municipios de León, en los que residen 47.173 personas. La categoría 3 agrupa 54 municipios con entre 3 y 5 comercios y 29.649 habitantes, mientras que la lista se cierra con las categorías 1 (sin comercios) y 2 (con uno y dos comercios), que incluyen a 31 y a 47 municipios respectativamente.
Un programa de acción específico para la mujer
También incide en que en todas las actuaciones enmarcadas en esta estrategia, estén o no diseñadas específicamente para la problemática rural, tendrán «especial consideración» con este ámbito. Así se refiere, entre otras medidas, incluir a los ayuntamientos y las diputaciones en la red de agentes de comercio interior o en crear «un punto de encuentro específico» para los representantes del sector en el ámbito rural.
También apuesta por apoyar más la presencia del medio rural en las campañas dirigidas a la promoción del comercio de proximidad que se pongan en marcha.
El análisis señala que los sectores más habituales en los pueblos con escasez de negocios son, por este orden, las farmacias, los bazares y los estancos y supermercados, una circunstancia que se atribuye a la importancia de tener acceso a «la diversificación y a la venta de productos de primera necesidad para la salud». La media en estos municipios, recoge el documento, es de 150 personas por cada comercio, y en estos territorios también tienen un papel fundamental carnicerías, combustibles y fruterías y panaderías.