Una carretera que incomunica

«Nos han dejado todas las entradas a nuestras fincas y caminos sin acceso; se lo hemos advertido por activa y por pasiva a la Administración y no nos han dado respuesta, por lo que estamos muy indignados y nos vamos a manifestar», decía ayer un vecino de Aralla, que exige una solución al problema. Los vecinos aseguran que con las obras de la carretera que une La Pola de Gordón y Aralla, la empresa constructora ha obstruido los caminos por los que circulaban los tractores y los carros para acudir a las fincas particulares, y en total han bloqueado cuarenta accesos a propiedades privadas. Además, critican a la Junta Vecinal por no haber actuado a tiempo para evitar esta situación. Otro grupo de vecinos acusaba a la Administración de haber retirado el cartel indicador de la localidad de Aralla, que se encontraba ubicado en el cruce de la carretera con la C-623, lo que a su juicio contribuirá a que se reduzca el número de visitantes durante los meses de verano, que llegan a duplicar la población de la localidad montañesa. «Los hitos de la carretera estaban indicados en piedra labrada de forma cónica y las máquinas de las obras los destruyeron», denuncia uno de los vecinos, que aseguran que han enviado sus protestas a la Junta y han interpuesto las denuncias correspondientes, pero que no han recibido respuesta de ningún tipo. Ante esta situación, aseguran que se van a adoptar diversas medidas de presión, como cortes de la carretera en el mismo puerto de Aralla, así como manifestaciones ante en la capital leonesa. Ninguna competencia Los vecinos señalaban ayer que también han comunicado este problema al alcalde de Sena de Luna, pero les ha contestado que es competencia de la Junta y de los mismos propietarios de las fincas, por lo que solicitan la dimisión de la concejala del Ayuntamiento de Sena, que además es de Aralla, a la que acusan de no haber tomado cartas en el asunto para defender a sus propios paisanos y de mostrar una total pasividad. Los vecinos de Aralla sí reconocen que el arreglo de la carretera era necesario para el desarrollo de las comunicaciones de la localidad, pero «no actuando de forma abusiva con el cierre de los accesos a nuestras fincas», advierten.