Tensión en el instituto de Seseña
El centro reinicia la actividad tras las vacaciones con la ausencia de Cristina, muerta, y la de Chanel, la presunta autora del crimen, interna en un centro de menores
El instituto Margarita Salas de Seseña (Toledo) reanudó ayer las clases tras las vacaciones de Semana Santa con la destacada ausencia de dos de sus alumnas: Cristina Martín de la Sierra, de 13 años, cuyo cadáver apareció el pasado fin de semana a las afueras de esta localidad tras cuatro días de búsqueda y Chanel, la presunta autora del crimen, de 14 años, internada desde el lunes en un centro de menores por orden judicial.
Los profesores y compañeros de Cristina quisieron mostrar una imagen de normalidad guardando un minuto de silencio en el patio del instituto en recuerdo de la adolescente muerta. Sin embargo, los alumnos reconocieron que el ambiente en el Margarita Salas se ha vuelto enrarecido y tenso a raíz del trágico final que han tenido las disputas personales entre Cristina y su presunta asesina, que sigue la moda de la estética gótica. No en vano, entre ambas había una mala relación que las dos habían hecho pública en la red social Tuenti y que en más de una ocasión había desembocado en peleas. «Éste es un instituto normal y hay movidas como en otros institutos pero somos gente normal», indicó uno de los estudiantes durante la concentración. Otro lamentó que «antes Cristina no tenía muchos amigos y ahora le salen por todas partes». Varios alumnos denunciaron que las amigas de la joven detenida habían recibido insultos por parte de otros compañeros en su primer día de clase después de las vacaciones «simplemente porque salían con ella».
La violenta y prematura muerte de Cristina a manos presuntamente de una compañera ha reabierto dos debates: la necesidad o no de endurecer la Ley del Menor y el tipo de educación y de valores que una buena parte de los adolescentes está interiorizando.