Ciudadanos pide el voto útil de los constitucionalistas
El partido naranja tiene la voluntad de «volver a unir a todos los catalanes».
Efe | Barcelona
Ciudadanos concurrirá a las elecciones catalanas del 21-D como la fuerza del «voto útil» no independentista y con la voluntad de «volver a unir a todos los catalanes», según ha afirmado ayer el número dos de la lista de esta formación, Carlos Carrizosa.
Carrizosa, entrevistado por el programa Converses de Cope-Catalunya, reiteró el compromiso de su formación a articular, en el caso de ser la fuerza no independentista más votada, alianzas con el PSC y con el PPC para abrir una nueva etapa en Cataluña de gobierno constitucionalista.
En esa línea, pidió asimismo a los «comunes» que, si se da ese escenario, al menos se abstengan para favorecer este nuevo ciclo político y que no apoyen al «separatismo de Oriol Junqueras», el líder de ERC que esta semana tendía la mano a la formación que lidera Oriol Domènech.
Asimismo ha instado al cabeza de lista del PSC, Miquel Iceta, a que diga en esta campaña «si apoyará a Junqueras o a Arrimadas —la líder de C’s—» a la vez que ha mostrado su esperanza de que los socialistas catalanes hagan «lo que Cs ha hecho en Andalucía» al propiciar la gobernabilidad de la socialista Susana Díaz.
El dirigente de Ciudadanos afirmó que en los últimos dos años su partido ha demostrado que, con Inés Arrimadas como líder de la oposición, «tenemos un proyecto sólido» y que su formación es el «indiscutible» voto útil para evitar que los independentistas vuelvan a tener mayoría. Carrizosa aseguró que los independentistas actúan como «maestros del victimismo» y que no dudarán en utilizar la situación judicial de Carles Puigdemont para «distorsionar» la campaña electoral, después de que el juez belga que examina las euroórdenes de España contra el presidente cesado y sus exconsellers le haya citado nuevamente el 4 de diciembre, a las puertas de la campaña.
Estratagema
Precisó que para Puigdemont «todo lo que sea declarar ante el juez belga es una estratagema para esconderse y no declarar en España». Por otra parte, calificó de «insulto» la acusación que lanzó el viernes la dirigente de ERC Marta Rovira de que el Gobierno amenazó con un escenario de «violencia extrema» y «muertos en las calles».
«Es un insulto a mucha gente que se sienten catalanes y españoles y una agitación victimistas a sus electores. Con ello Rovira se parece en la forma de hacer a Gabriel Rufián —diputado de ERC en el Congreso— para quien todo el que no piensa como él es franquista». También criticó a la expresidenta del Parlament, Núria de Gispert, por sus alusiones hacia la líder de Ciudadanos en Cataluña, Inés Arrimadas, después de que la invitase a volver a Cádiz, a través de un tuit, y dijo que este tipo de expresiones son las que hay que desterrar de Cataluña.