Los subcontratados de Repsol en Puertollano exigen más seguridad

Los trabajadores del complejo petroquímico de Repsol-YPF en Puertollano (Ciudad Real) y los de las empresas subcontratas de esta compañía harán la guerra por su cuenta a la hora de exigir más medidas de seguridad en esta instalación, donde el pasado jueves la explosión e incendio de siete tanques de gasolina refinada acabó con la vida de seis trabajadores y causó heridas muy graves a otros cuatro. Los cerca de mil empleados de las subcontratas protagonizaron ayer el segundo de los tres días de paro acordados por este colectivo para protestar por este siniestro y solidarizarse con las víctimas. Después de concentrarse ante las puertas del complejo industrial ante numerosos efectivos policiales, decidieron constituir su propia mesa negociadora, formada por dos representantes de cada subcontrata, de la que se desvincularon los delegados sindicales de UGT y CC.?OO. en esas empresas. Al mismo tiempo anunciaron que hoy quieren iniciar una marcha a pie hasta Puertollano, situada a tres kilómetros de las instalaciones, para manifestarse por las calles. Las relaciones entre estos empleados y los delegados de los sindicatos mayoritarios son tan pésimas que algunos delegados de UGT que se introdujeron en la reunión de los subcontratados fueron expulsados. Estos trabajadores volvieron a denunciar las condiciones laborales con que se encuentran a diario en materia de seguridad. «Vas con miedo porque estás en medio de tuberías viejas, algunas podridas y con fugas. De vez en cuando una chispa, salta fuego, vienen los bomberos a apagarlo y al día siguiente dicen que no se puede trabajar, pero después vuelven a dejarte trabajar. Está todo hecho un desastre, todo viejo», relata uno de los empleados que no se sienten representados por UGT y CC.?OO. De hecho, la tabla reivindicativa que presentarán a la dirección de Repsol se elaborará sin contar con estos dos sindicatos, a los que se enfrentaron en la tarde del pasado lunes en la manifestación convocada por las centrales sindicales en el centro de Puertollano. Una movilización en la que los secretarios generales de CC.?OO. y UGT, José María Fidalgo y Cándido Méndez, respectivamente, fueron abucheados, insultados y zarandeados. A raíz de estos incidentes «justificables», según los portavoces de los trabajadores de las subcontratas, las direcciones provinciales de los dos sindicatos quisieron restar importancia a estos hechos que atribuyeron a unos pocos alborotadores. Intervención municipal Mientras las relaciones entre los sindicatos y los trabajadores de las subcontratas van de mal en peor, las dos comisiones de investigación abiertas para esclarecer las causas del accidente -la formada por representantes de la petrolera y los sindicatos y la de la Consejería de Industria de Castilla-La Mancha-continúan su labor. La primera de ellas ya ha establecido su línea de actuación: sus miembros visitarán primero el lugar de los hechos, después interrogarán a los testigos y, por último, verificarán el registro de los datos técnicos de las últimas 24 horas previas al siniestro. En cuanto a la comisión de investigación abierta por la Junta, el alcalde de Puertollano, Casimiro Sánchez Calderón, del PSOE, anunció ayer que la Junta de Portavoces de este ayuntamiento va a solicitar a la administración autonómica su «presencia activa» en esta comisión, con representantes técnicos y políticos, «para informar puntualmente a los ciudadanos». El consistorio exigirá que se adopten las medidas de seguridad necesarias en el complejo petroquímico «para que no se repita una situación como la ocurrida», indicó Sánchez.