PP e IU reclaman una consulta popular

El PP e Izquierda Unida reclamaron ayer al Gobierno que no renuncie a refrendar la Constitución europea en una consulta popular. Ambas formaciones salieron así al paso de las dudas mostradas por el ministro de Asuntos Exteriores por el método que se empleará para dar la conformidad con el texto aprobado por los 25 en la cumbre de Bruselas. El portavoz popular de Exteriores, Gustavo de Arístegui, recordó que la celebración de un referéndum es «un compromiso» con los ciudadanos que adquirió el anterior Gobierno con el respaldo del PSOE desde la oposición. No celebrar la consulta, advirtió, sería «un error muy grave». El número uno en la lista de IU en las pasadas elecciones europeas, Willy Meier, también defendió la convocatoria de un referéndum que sea vinculante para el Gobierno y señaló que sería deseable que la pregunta fuera la misma y se hiciera de forma simultánea en los 25 países que acordaron la Constitución. Meier, sin embargo, se mostró contrario al texto aprobado porque no es el que Europa «necesita» ya que se aleja del enfoque social, prima «un modelo económico neoliberal» que apuesta por el empleo precario y la privatización de empresas públicas, y sigue subordinada a Estados Unidos. El eurodiputado de IU defendió una Europa «más social» que sirva de contrapeso a los enfoques «monetarios» actuales. Los nacionalistas catalanes y vascos relativizaron el éxito de la Constitución europea. Artur Mas advirtió que el hecho de que el texto se traduzca al catalán no supone «nada nuevo» pues ya se ha hecho con otros tratados de la Unión, así que no es ninguna «gran noticia».