Una decisión «ni deseada ni querida»

Maragall aseguró ayer que el cese de los consejeros de ERC era necesario para acabar «con la confusión» de cara al referéndum. Maragall dijo que tomó «la determinación dolorosa» de cesar a los consejeros de ERC, porque «mi obligación» es acabar con «la incertidumbre» y «evitar cualquier tipo de confusión», ya que «el referéndum del Estatuto ha de poder celebrarse en condiciones de máxima claridad» y «sin interferencias de otras cuestiones políticas». Para el presidente catalán ha sido una «decisión difícil» pero afirmó que ERC «ha roto un compromiso explícito, el compromiso de que en ningún caso adoptaría una posición de votar no a un proyecto (de Estatuto) que, aunque sea legítima, es incompatible con la coherencia y el liderazgo del Gobierno». l presidente dejó claro que está convencido de que «he hecho todo lo que estaba en mis manos para que ERC participara en el acuerdo sobre el Estatuto», y «consecuentemente con este espíritu, he ofrecido a Esquerra Republicana que la salida del Gobierno de sus consejeros sea entendida estrictamente como una decisión política obligada, no querida ni deseada», añadió.