Los limpiadores no quieren pasear al perro
Los limpiadores de Presidencia del Gobierno se plantan hoy. A partir de las siete de la mañana los 120 trabajadores contratados por la empresa Servimil están convocados a una huelga indefinida para protestar por la situación laboral de la plantilla. Denuncian que la empresa adjudicataria de la labor de limpieza en el Palacio de La Moncloa les obliga a prestar «servicios personales» a los cargos del Gobierno que se asemejan más a los de un empleado del hogar que a los de un limpiador. Según un portavoz de la federación regional de actividades diversas de Comisiones Obreras en Madrid, Gabino Bodes, los empleados de Servimil fueron contratados «estrictamente» para desempeñar las labores de limpieza en el Palacio de La Moncloa, pero muchos de ellos han acabado siendo improvisados expertos en protocolo, hacen de camareros, costureros, cocineros, planchadores e incluso se han visto en situaciones «inimaginables» como la de tener que sacar a pasear al perro de José Luis Rodríguez Zapatero, cuidar de sus hijas o hacer de asistentes de la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega. Más dinero En el sindicato explican que esta situación no es nueva porque desde el principio de la democracia este problema se ha dado con los distintos ejecutivos. La novedad es que anteriormente las otras empresas adjudicatarias compensaban a los empleados con un plus salarial por la realización de estos trabajos «que nada tienen que ver con el convenio colectivo de aplicación». Servimil, encargada de esta actividad desde principios de año y por un mandato de dos, se ha negado a firmar el incremento de 81 euros mensuales además de las mejoras sociales que reclaman los trabajadores. En lugar de esas mejoras, ha ofrecido a un grupo de limpiadores que trabajan como cocineros y camareros 12 euros mensuales, algo que el sindicato que les representa considera «insultante». Hoy empezará la huelga de limpieza y sólo un 25% de estos empleados acudirá a La Moncloa para realizar los servicios mínimos. CC.OO. sospecha que la situación laboral de los trabajadores de Servimil está siendo «consentida y potenciada desde la misma Presidencia.