Diario de León

DE VALPORQUERO A COLADILLA

Reminiscencias del pasado

Valle de Vegacervera. Paisajes de alta montaña donde la roca caliza aflora por doquier, tradición, cultura y gastronomía se unen en un recorrido de once kilómetros que no dejará a ningún visitante indiferente. Enormes

Vista desde Vegacervera .

Vista desde Vegacervera .

Publicado por
Nuria González
León

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Esta ruta tiene un recorrido de once kilómetros, apto para senderistas más o menos acostumbrados a caminar ya que se puede realizar en varias etapas.

El punto de partida se sitúa en Valporquero dónde es imprescindible su visita a la magnífica cueva, fruto de la erosión kárstica de la caliza.

Hacia el oeste y atravesando una vega, cultivada hasta hace pocos años, el viajero llegará a los puertos del valle de Vegacervera que han sido pastos para el ganado. Después de atravesar estas tierras comienza el descenso hasta Valle de Vegacervera, un camino angosto en el que abundan la roca caliza, las cuevas y fuentes. Este pueblo conserva algunas reminiscencias románicas en su iglesia.

La ruta continua por detrás del cementerio, dónde se toma el camino que conducirá a Coladilla. En esta localidad se conservan algunos restos del ramal del camino de San Salvador a Oviedo.

Coladilla tiene mucho encanto. No sólo por su enclave privilegiado sino también por sus productos lácteos de un sabor especial y único. Sus quesos son un buen tentempié para recuperar fuerzas y continuar con el recorrido hacia Valporquero. En este trayecto se inicia de nuevo el ascenso y el paso por los puertos. Entre robles aparecen las casas de Valporquero. En el camino hay que detenerse en la iglesia de Valle de Vegacervera, en la que se encuentran restos labrados con el ajedrezado jaqués. También es parada obligatoria la iglesia de Coladilla, de traza románica, documentada desde el siglo. XII. En ella se pueden apreciar elementos decorativos de interés, como los canecillos que representan motivos geométricos, vegetales y antropomorfos y la puerta de acceso dónde aparecen grabadas las conchas jacobeas. Son sólo algunas de las muestras que ha dejado un ramal del camino francés a Compostela, conocido como camino de San Salvador de Oviedo. El hayedo de Valporquero ocupa hondonadas frescas y umbrosas, constituyendo bosques en los que el haya es casi la especie exclusiva. El visitante no debe perderse tampoco un paraje tan impresionante como las Hoces de Vegacervera.

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