Diario de León

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Quisieron sacudirle el polvo del éxito y renovarle la estampa; ha quedado resultón, con diseño más musculoso y moderno . Saldrán los primeros en abril, hay expectación. Se vuelcan con él porque es el modelo más importante de la marca, el que les da más nombre y más plata: Seat León . Fue el modelo más vendido el pasado año y lleva cinco seguidos como líder del mercado habiéndose fabricado ya 2.2 millones de unidades que van por todo lugar diciendo León cuando pasan y les miran por detrás porque llaman algo la atención.

Llevan mucho tiempo con este modelo. Cuando el príncipe Felipe andaba en lenguas de siete leguas y a salto de colchón, ya le regaló a su amigovia Eva Sannun un León de esos, entonces cochecito molón, plateado y bautizado allí noruego; y de aquello ya llovió. Lo cierto es que este seat se ve por muchos sitios en Europa. Y si eres cazurrete y ves con sorpresa unos cuantos cruzando a la vez el puente Gálata en Estambul, tan lejos, y diciendo León con su culo en letras de metal brillante -León, el nombre de tu ciudad, tu tierra o « tu reino, venga a nosotros » (dicho sea con moción, emoción y ¡ay-xuasús-xuasús, vota Móstoles!)-, pues se te viene arriba un sentimiento legítimamente paleto de orgullo y satisfacción y te arrancas por lo bajo con un vibrante ¡ahivaleónleónleón, ahivaleónleónleón! , sin exagerar, que tampoco hay que llamar mucho la atención en tierra mora, no te hagan después besar el suelo y te apalpen la guinda y la faltriquera.

León le ha funcionado a Seat inmejorablemente. Fue y es filón. Pero la atrevida actualización del modelo presenta una novedad puntual que aquí sentará como patada al morro, pues ya no se llamará León, así, bien acentuado, sino Leon, sin acento o tilde, y ya para siempre, un Leon desmayadito, Leeeon, como tributándole acento a la e , tímida y femenina e que reclamó vez o voz y la tuvo: Leon. ¿Hasta dónde llegarán?, clama un cazurrista airado, ¿es que a León se le roba ya hasta la tilde, esa pobre astillita untando solo al círculo cerrado, Ó? ... ¡pero si LE Ó N es eso!...

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