Editorial | Reparar la Mesa por León con urgencia

La resaca de las movilizaciones del 12-M no aportó grandes novedades. Y probablemente esa es una mala noticia. Si alguien vio en las concentraciones el fin de un proceso está equivocado. El reto, lo importante, empieza ahora. Y ante la ausencia absoluta de propuestas parece que toca recuperar lo avanzado. La Mesa por León nació y avanzó marcada por abundantes errores. Pero a día de hoy es la única herramienta para conseguir algo. Urge su convocatoria. Y una reformulación buscando que las sillas las ocupen los que de verdad tienen algo que decir y que aportar. Uno de los fallos fue colocar al frente a un órgano político y además ajeno a la provincia como fue la Delegación del Gobierno. Ni convoca la Mesa a pesar de las reiteradas promesas ni comparte los objetivos expresados por la mayoría de los manifestantes. En el recuerdo está su planteamiento de que esto no es cuestión de inversiones públicas.

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