Diario de León

Creado:

Actualizado:

N o es el Tour. Y no es lo mismo. La Vuelta Ciclista a España es otra cosa, mucha cosa, pero otro cantar, un remedo voluntarioso en la estación de lo árido total, la peor de ver. Y ahí desfilan paisajes de alguna grandeza, pero a menudo baldía o despoblada, pues casi un tercio de nuestra superficie agraria útil no se cultiva, dice la encuesta de Rendimientos Agrarios; y de lo cultivado, tres cuartos son puto secano y solo uno regadío.

Este es el panorama de las etapas vistas al paso de esa  serpiente multicolor  que, subiendo o bajando lomas y puertos, surfea la aridez que tiñe el fondo de pantalla de color arcilla o barro seco, de ocres y caleños, de rastrojeras, serrascas o cardos pardos... ¿y lo verde?... en fuga... lágrimas dispersas, verde oliva de carrascal encinero o pinar austero. El ojo del helicóptero no engaña y ahora entendemos que desde el norte europeo o campiñas francesas vean a España como parte de África (pues vaya tomando nota, mesié, África ya empezó a cruzarle los Pirineos).

Como pizarra escrita debe leerse esta piel de toro con la Vuelta y recordar lo visto en el Tour para que pedaleen también ahí las malditas comparaciones. Pero mejor no hacerlas. Mejor pensar que mucho de lo que asoma a uno y otro lado de la carretera es  manifiestamente mejorable  (¿expropiable, pues?), pidiendo no poca labor, inversión largamente debida y un plan diáfano que regenere, o al menos detenga, esta ruina que no deja de venirse a más.

Pero lo que Luis Carrizo no entiende del Tour y de la Vuelta es la imagen del ciclista arrojando alegremente basura al asfalto o a la cuneta: bidones de agua o energéticos, bolsas de barritas o geles y hasta la prenda sudada que le sobra en la escalada. Y dice Luis que, hecha ya la invitación a que hagamos lo mismo desde el buga o la moto al cruzar campos, deberían tener un coche escoba como el que recoge a ciclistas apeados de la carrera para ir atropando también toda la porquería que siembran en cada etapa... ¿lo harán?... andallá... Si además de árido le echamos mierda encima, lo nuestro no tiene remedio, cree.

tracking