La opinión del lector

Dedicada a los Genarines

Con este recuerdo a nuestro Genarín, levantamos en este momento la veda a los «borrachos Genarines» invitamos a esta fiesta a los médicos, a las señoras estupendas y no tanto y al Inem. El León fiestero se pone en marcha, para llenarlo de Genarines, aquí no se admiten abstemios ni aburridos, pues celebramos una fiesta «borracha» una fiesta que caiga bien a la autoridad, somos Genarines que estamos aún en período de reciclaje. Los Genarines de esta fiesta seremos por unas horas «borrachos sin vocación», somos los Genarines del siglo XXI, que sabemos divertirnos ¡pobres borrachos!

Queremos ser los Pepito Grillo por 12 horas, el sistema sólo nos lo permite unas horas, y en esas horas cualquier templanza la asociaremos a la alegría y la prudente desvergüenza. Somos a partir de ahora los entusiastas del orujo e iremos por la fiesta como lo hacen los políticos en las elecciones repartiendo sonrisas y abrazos. Sabemos lo que es la civilización, el ocio y lo anecdótico, lo que no sabemos cuántos lo respetarán. Mentirán los que digan que en esta gran fiesta no somos todos iguales, el calvo, el bajito, el alto, el bajo, el gordo, y el que canta, todo durante unas horas estará permitido, menos al que le huelan los pies, los antipáticos y los que tiene caspa y, ojo, con los aguafiestas que estén camuflados... Nada dice la Constitución ni el Boletín Oficial del Estado de los Genarines, ni de las angustias y, tampoco habla de Santa Teresa que vivía sin vivir, por lo tanto los Genarines, queremos vivir bebiendo mientras los impecables y los estéticos que dictan el boletín no nos lo prohíban y, si de ellos, hay alguno aquí y ahora que beba o se marche y vuelva el próximo año reciclado.

Repetir conmigo. ¡Viva Genarín! ¡vivan los Genarines! ¡viva León!

Gregorio Martínez. LEÓN