EDITORIAL: El Incibe afronta el problema de las familias con las nuevas tecnologías
La revolución tecnológica que está ocasionando la generalización del uso de los denominados smartphones plantea problemas evidentes para las familias, porque simplifica el acceso de los niños a las redes sociales. El Incibe (Instituto Nacional de Ciberseguridad) pondrá en marcha un teléfono para ayudar a los hogares ante la creciente preocupación que se detecta entre los padres, por el incremento de los problemas en los que se ven involucrados menores. El dato facilitado por el propio Incibe, que ha recibido más de 5.000 consultas directas de familias, hace evidente la necesidad de que se facilite información y apoyo a los responsables de esos menores para afrontar los nuevos conflictos de la mejor manera posible.
Más de la mitad de los menores de 11 años dispone de un teléfono móvil y es incuestionable que no tiene la formación necesaria para defenderse de las amenazas a las que se ve sometido al verse empujado hacia la complicada realidad que hay en ese nuevo mundo virtual que existe en el ámbito digital. Si la sociedad ha sido capaz de diseñar fórmulas de protección para la infancia en los más variados ámbitos se hace imprescindible un esfuerzo eficaz para que esa defensa de los menores también alcance a las redes sociales.
La puesta en marcha de campañas informativas, con visitas incluidas a los propios colegios, se intensificará y ampliará con un convenio entre el Incibe y el Ministerio del Interior para reforzar la protección a los menores. El objetivo es compartido por todos pero lo importante ahora es acertar con las herramientas que doten de eficacia a ese imprescindible escudo para los niños frente a las amenazas.
