Diario de León
Publicado por

Creado:

Actualizado:

Asistimos estos días a un clara estafa electoral por la cual un presidente del Gobierno en funciones acepta cualquier reclamación por disparatada que sea a cambio de su investidura. Quien ha rebajado las penas de más de 1.200 agresores sexuales, excarcelando de momento a 121, acuerda una amnistía para más de 300 amiguetes de sus socios, acusados o condenados por desórdenes públicos, malversación, corrupción, guerrilla urbana o agresiones a la policía, antes o durante el golpe de opereta de 2017, quienes encima manifiestan volverán a hacerlo, humillando al Estado a pedirles perdón. Además de romper las costuras del pacto constitucional al que modélicamente llegaron todos los partidos en 1978, se procede al fin de la independencia judicial y la igualdad entre los españoles. Se trocea la gestión de las pensiones, la Agencia Tributaria, Adif/Renfe o el MIR. Todo ello bajo la atenta mirada de la denigrante figura de un mediador internacional para comprobar el cumplimiento de los pactos de los que depende la andadura del Gobierno, como si fuésemos Somalia, con un conflicto bélico desde 1991. Mala memoria tiene quien apoyó el art. 155 de la Constitución para intervenir el gobierno de Cataluña y ahora tiene de interlocutores a un delincuente a quien indultó (Junqueras) y un prófugo de la justicia (Puigdemont). Eso sí, hay que reconocer que Sánchez lucha el balón hasta el ultimo minuto, aunque sea para meter el balón en propia puerta.

Recordemos que la legislatura empezó mal estéticamente, con la victoria del Partido Popular con 137 diputados, seguido del PSOE con 121 escaños. Eso en el Congreso, ya que en el Senado el PP obtuvo una holgada mayoría absoluta. Sin embargo, nuestro sistema electoral no permite la elección directa del presidente del gobierno, sino a una serie de diputados que lanarmente respaldan al candidato que les digan, ya que la inmensa mayoría carecen de trayectoria laboral que les equipare o supere en ingresos a la política. Pasado el momento de investidura de Feijóo, quien en base a la cortesía parlamentaria debía haber sido felicitado por su contrincante, optó este último por seguir los pasos de Trump con Biden, hacienda gala de una clara mala educación, en la que volvió a reincidir al no contestarle personalmente en el debate de investidura. Lo mismo hizo su comunista pareja de baile. Siguiendo con esta exquisita elegancia, sus socios no acudieron a las consultas preceptivas con el Rey o a la jura de la Constitución el día 31 de octubre por la mayoría de edad de la heredera del trono. Tampoco asistieron 3 ministros, además de permitir jurar o prometer el cargo, poco menos que por Snoopy, convirtiendo el Parlamento en un circo.

Los 174 diputados que apoyaron a Feijóo no estaban dispuestos a cruzar una serie de líneas rojas que les hubiesen llevado a los necesarios 176 que otorgan la mayoría absoluta. Por tanto, toma el turno Sánchez, quien primero llega a un acuerdo con Bildu, cuyo seguro obsceno contenido no ha sido desvelado y después con Sumar, amalgama de 15 diferentes tribus comunistas que cambian de nombre en cada proceso electoral. No era de extrañar el acuerdo después del teatrillo del debate electoral, tipo Barbie y Ken, quizá coincidiendo con el estreno de la película. Si no la han visto les animo a leer las 48 páginas «Una nueva coalición de Gobieno progresista para España», llenas de azúcar, la vida es bella y adobadas de una buena dosis de chatarra ideologica, que ha llevado a diversas empresas a hibernar inversiones milmillonarias, quizá la más sonada, la de Repsol ligada a la descarbonización en Tarragona, Cartagena, Puertollano y Bilbao aduciendo la ausencia de una marco jurídico previsible. Posteriormente se firma con el BNG, PNV o Coalición Canaria. Pero los que más trascendencia económica tienen son los pactados con dos partidos que obtuvieron en las pasadas elecciones el 1,9% y el 1,6% de los votos respectivamente. ERC con el Acuerdo entre el PSOE y ERC para la segunda fase del proceso de diálogo, negociación y acuerdo , en el que se incluyen decisiones concretas y el convenido con Junts el día de la Almudena, cuyo contenido aprobado trae como primera medida buscar la impunidad, añadiendo una serie de intenciones como un cupo al estilo vasco o un referéndum.

El actual sistema de financiación autonómica fue reformado en 2009, con la luz verde de la Generalidad catalana, a quien Zapatero hizo un traje a medida. Muy resumidamente, las comunidades autónomas de régimen común se financian con: tributos propios, tributos cedidos por el Estado, participación en impuestos estatales y una serie de fondos de compensación (Garantía, Suficiencia o Convergencia). Como puede comprobarse en los trabajos que periódicamente publica Fedea, entre otros, Cataluña no está infrafinanciada, ya que el Estado aporta a estos fondos 10.600 mn y 3 comunidades 8.815, de los cuales Madrid coopera con 6.313 y Cataluña 2.168, 3 veces más. 24% y 9,7% de lo que ingresan, repectivamente. Baleares contribuye con 334 mn. Las demás reciben todas, Castilla y León 1.886 mn. Según ERC el sistema estaba diseñado para períodos de estabilidad económica y piden una financiación adecuada, que básicamente sería copiar el privilegio medieval contemplado en la constitución y aplicable exclusivamente a Vascongadas y Navarra, el cupo, que significa no sólo que establecen y recaudan sus impuestos pagando un «alquiler» anual al Estado por sus servicios, sino que pueden decidir sin reciprocidad sobre los impuestos de todos los españoles. A ello se añade que el PSOE ha puesto por escrito una serie de transferencias de competencias y sobre todo dinero, como Rodalíes, regado antes con 6,3 miles de millones y otras no menores.

Pero el grueso es la deuda, de la que, como primer paso se condonarán 15 mil mn, de los 450 mil mn que dicen son acreedores históricos. El Gobierno español aprobó en julio de 2012 el FLA o Fondo de Liquidez Autonómica, línea de crédito concebida para que el Estado preste dinero a las Comunidades Autónomas y que éstas no tengan que financiar su deuda en los mercados. De esta manera, Cataluña, que por irresponsabilidad y pésima gestión ha sido incapaz de financiarse, al ostentar su deuda la calificación de junk bond (bonos basura) por Moody’s y Fitch (S&P ni la califica), con nulo éxito en los últimos 4 años en los que ha realizado road shows para testar al mercado. Por ello 71.852 mn, el 85% de su deuda total es con ese Estado, que parece le agravia, mientras la de Madrid es cero. Para ponerlo en contexto, Castilla y León, que sí ha gozado del favor del mercado, pese a su tamaño, debe al Estado 1.966 mn, es decir, 829 Euros/habitante, mientras la cifra catalana asciende a 9.231, 11 veces más, habiÉndose ahorrado desde 2015, 8.000 mn en intereses, de acuerdo con BBVA Research, Cataluña, al pagar a cargo de todos los españoles los «bonos patrióticos» que iban venciendo.

La condonación del 20% de su deuda en realidad es un rescate en toda regla a una administración insolvente, como admite ERC en el documento firmado, «con el fin de sanear la situación financiera de la Generalitat y facilitar su vuelta a la financiación en los mercados de deuda», poniéndose a la altura de países del tercer mundo o apestados financieros como Cuba o Venezuela a los que se les ha perdonado dinero. Esto afecta sobremanera a la credibilidad, poniendo de relieve las pocas garantías de invertir en la región catalana y la malísima señal para los inversores al no incentivarse una gestión responsable en una suerte de peronismo mediterráneo que no nos va a llevar a buen puerto, ya que no se pide a cambio disciplina contable. Más les valdría reflexionar por qué desde 2017, 8.934 empresas han trasladado su sede fuera de la región, incluida La Caixa.

Un cambio de escenario de este calibre, requiere del máximo consenso que garantice su permanencia y no puede hacerse aislando a quien no sólo ganó las elecciones nacionales, sino también las cercanas municipales y regionales, con un aplastante trasvase de poder fruto de ser el PP el partido más votado en 13 de las 17 autonomías, gobierna en 10 de las 12 en las que hubo elecciones, ganó en 39 de las 52 provincias, mandando en 30 de las 52 capitales de provincia. Las 12 comunidades lideradas por el PP representan 31,8 mn de habitantes y el 54% el PIB de España mientras que las 3 del PSOE el 10,5% del PIB. Querer gobernar omitiendo este dato es un juego muy peligroso de quien ha conseguido en sus 5 años de gobierno que España baje 5 puestos, uno por año, hasta ser el país número 17 de Europa por renta per cápita. Un hacha.

Empezó mal la legislatura, acabará mal también. Y pronto, Sánchez no ha sido capaz de cumplir ningún mandato entero. Estamos ante la primera letra que gira el independentismo, las siguientes serÁn día a día, chantaje mediante, para poder gobernar a cambio de seguir perdonando una deuda que no piensan pagar al tener enfrente a un yonqui que está dispuesto a malvender las joyas familiares por un gramo de heroína.

Todas las organizaciones empresariales se han pronunciado sobre el grave impacto de la aministía, los contenidos de los pactos y la inestabilidad institucional en la atracción de inversiones y la imagen exterior de España. Pero en cuanto al sistema de financiación de las comunidades autónomas y la condonación de deuda, que hemos señalado, hay que parafrasear al escritor catalÁn Josep Pla al llegar a Nueva York en los años 50, «Y esto, ¿quién lo paga?». Muy fácil, a escote los demás. No es magia, son tus impuestos.

tracking