Otro desmán

Quien conozca a fondo Internet sabe que el control de las descargas, de los sistemas P2P, de los numerosos métodos de intercambio entre particulares, etcétera, resulta muy difícil, casi imposible, a menos que se implante una especie de Estado policial como en China o en Corea del Norte. Pero nuestros eurodiputados, tan amigos de la burocracia, no atienden a razones y han cometido el desmán de autorizar el corte del servicio de Internet sin intervención judicial previa. Ya se sabe que hay un serio problema con los derechos de autor, pero la resolución de estos problemas no pasa por someter Internet a una estricta censura sino por aguzar la imaginación, replantear los negocios, conquistar los mercados mediante más productividad y mayor valor añadido.