Fases

1. Asintomática en la que la microcirculación venosa y linfática se desacelera. Los vasos se dilatan y la sangre permanece en ellos más tiempo de lo habitual.

2. Edematización del tejido conectivo por la salida de líquidos de vasos venosos. En esta fase la celulitis aún es reversible.

3. Crecimiento de los adipocitos: los adipocitos acumulan grasas y aumentan de tamaño e incluso se rompen, vertiendo al exterior su contenido graso y tóxico. Fase no reversible, salvo si se lleva a cabo un tratamiento exhaustivo y sostenido.

4. Encapsulación de los adipocitos. A simple vista «piel acolchada», con dolor y sensibilización de la zona afectada. No es reversible. Mejora con un tratamiento local intensivo.

5. Formación de macronódulos en la que los vasos y los nervios están comprimidos, lo que acaba produciendo una alteración nutricional del tejido conjuntivo. Se forman las ondulaciones características: «piel de naranja».