Los SIGD de León, la lucha invisible contra el terror

cristina fanjul | león

Es el único servicio de la Comandancia cuya puerta tiene acceso restringido. Son pocos los que la han atravesado. Un mural que rinde tributo a todos los asesinados por el terrorismo preside la gran sala del SIGC, el Servicio de Información de la Guardia Civil, la inteligencia del Cuerpo, la que vela porque la amenaza no siga siendo una amenaza, la que se hace invisible y se mezcla con el terror para que el terror no salga a la superficie. «Tenemos unidades que trabajan en operaciones contra el terrorismo interior, como ETA, reflujos de Grapo, y la amenaza exterior. «La gente ya se ha olvidado pero el primer atentado yihadista ocurrió hace 32 años». Se refiere el responsable del Grupo de Información de León, Marcos, a la bomba que en 1985 explotó en un área de servicio El Descanso de Madrid, una explosión que mató a 18 personas y dejó 82 heridos. Todos los integrantes del SIGC en León, cuyo número también es secreto, han ‘hecho la mili’ en el País Vasco. Todos ellos tuvieron que aprender a respirar junto al hálito de ETA, todos están, por lo tanto, licenciados en la vanguardia contraterrorista. En León hay un Grupo que reporta información al jefe de la Comandancia. 

Una de las características fundamentales de esta unidad es que no está sujeta a demarcación. Su territorio no tiene fronteras de servicios o cuerpos policiales. «Trabajamos en cualquier área en la que pueda haber desestabilización», destaca Marcos, que añade que hay un órgano de coordinación que depende de la Secretaría de Estado de Seguridad del que emanan los protocolos a seguir.

El jefe del SIGC de León deja claro que su grupo se encarga de vigilar, de controlar todos los riesgos que pueden confluir en una amenaza terrorista y, por ello, desarrollan una operación al año con el fin de comprobar si todas las informaciones que les llegan son verdaderas. Sus operaciones son secretas y están sujetas a la ley de secretos oficiales. Estudian de manera voraz, lo leen y lo analizan todo; son expertos en investigar las relaciones sociales, especialmente en Internet, el lugar en el que se fragua el adoctrinamiento y la captación. «La ingeniería social es una de nuestras especialidades», precisa el jefe del SIGC. 

Deja claro que la formación y el estudio es continuo. «Hay «malos» idiotas, pero son los menos», asegura. «Necesitamos conocerlos». El sargento recuerda que ningún terrorista yihadista resulta obvio. Más bien al contrario. ¿Sabe lo que es la taqiyya? El jefe del grupo explica que este precepto del Islam resulta de radical importancia para luchar contra el terrorismo. «Permite a los musulmanes no cumplir con sus creencias religiosas con el fin de engañar al infiel», sostiene. Tiene, no obstante, palabras tranquilizadoras y asegura que en León los musulmanes atienden una interpretación moderada del Islam, si bien no niega que haya tendencias como el salafismo o el wahabismo. «Pero están controladas», destaca.

Permanece en silencio el sargento ante preguntas poco convenientes. Sonríe y mantiene el silencio. «Los casos aislados no preocupan porque no hacen dogma», dice como respuesta. Añade un dato importante, un dato que revela hasta qué punto la información resulta importante siempre, incluso la que en ocasiones pueda parecer fútil, porque hay datos que cobran sentido cuando se conjuga con otros. «Nuestra misión es poner la información en conocimiento de los escalones superiores porque noticias que en el ámbito de León pueden parecer ambiguas, tienen importancia a otra escala», remarca.

Entre las principales operaciones desarrolladas por el SIGC de León está la de contraproliferación de organizaciones y grupos concertados en los que hay armamento implicado. Grupos anarquistas, paramilitares.... la información con la que trabaja el Servicio de Información de la Guardia Civil de León suele llegar orientada desde la Interpol y otros servicios ajenos y propios del cuerpo. Y es que las unidades de información nunca trabajan solas. «La deslocalización de la información no funciona», sostiene el sargento.  El Grupo de Información de León fue pionero en la investigación de los delitos de odio contra las víctimas de ETA en las redes sociales. De hecho, una de las primeras detenciones por esta razón se realizó en la provincia. 

Mujeres

Al revés de lo que ocurre con otros servicios de la Guardia Civil en León, el SIGC no cuenta aún con mujeres. «No tenemos y es una lástima porque son muy importantes», asegura Marcos. El sargento sostiene que en todos los temas en los que se implica la relación humana, las mujeres son un eslabón esencial. «Piensan de manera más creativa y son más ágiles desde el punto de vista mental en la toma de decisiones para solucionar problemas», afirma. Y es que el agente deja claro que  una de las principales cualidades en este servicio es la imaginación. «Es una característica fundamental», sostiene al tiempo que deja caer que no todas las mujeres al igual que los hombres cumplen el perfil para la especialidad.