Que se van

Mentíos si queréis, subid incluso al caballo de Espartero y abrid bien la boca ordenando carga, pero lo de Cataluña os acabará sabiendo a cantazo en los dientes.

Se ve que el orujo de hierbas (secretas) -lo elabora nuestro oráculo de Pedrún para él solito- le vino revelador y agudo. Resumo su visión: Que se van. Los catalanes. Se acabarán yendo, no os engañéis. Que sí. Y más pronto que tarde: más pronto de lo que suponéis y más tarde de lo que imaginan ellos. Ese tren ya no solo no reduce su velocidad de choque y cacharrazo, sino que a lo bobo va sumando vagones que añadirán inercia al convoy si la máquina afloja, que tururú, pues no deja de oírse al fogonero atorrante gritar eufórico ¡más madera!, aunque calla el ¡esto es la guerra! para que no se le vean las orejas a la rebelión... y al chacachá del tren.

Después, nos preguntó: ¿Y quién es el culpable de que hace diez años el independentismo fuera un 32% y hoy suba ya a un 51-53%, sin contar ese otro 65% catalán que cree que debería convocarse un referendum?... votem, collons, susurró Iceta, alarmó y le exigieron un mentís, aunque ya está claro que hay mucho no-independentista que cree razonable la consulta y así se zanjaría el asunto de una puta vez (a buenas horas, noi, haberlo hecho entonces).

Si aquí os harta el lío catalán, poneos en Cataluña, dentro de aquel fragor y paisaje cotidiano lleno de ofendiditos o borrachos de fe patria... no hay más asunto todo el día en esa tele solo suya, todo el día en el bar estelado, en el curro con pegatinas, en la tienda de reojos y altanerías, ruido amarillo del «indepe» que encuentra su mejor pólvora en un victimismo que corre que se las pela y va engordando porque, vistiendo a España de Franco, ¿quién no la odiará allí?... y si lo vocea también el Camp Nou y el bocachancla de su plantilla, todo simpatizante extranjero del Barsa jaleará también sus consignas/pancarta de cien metros. Y si ayer se apuntó a ello un pilón de senadores franceses, mañana lo harán igual en Washington o Berlín... mientras Felipe González aboga ahora por lo federal, jodeos.