Diario de León

Verano inclusivo en Cubillos del Sil

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ana gaitero

El Bosque de los Sueños de Cubillos del Sil, en el Bierzo, empezó ayer su aventura veraniega con más de 120 niños y niñas con y sin discapacidad. Se cumplen dos décadas y dos años de experiencia de este campamento inclusivo pionero en España en el que durante doce días conviven adolescentes con diferentes capacidades en un entorno natural y adaptado al cien por cien.

La diversidad es total. Llegan desde diferentes provincias de Castilla y León, Asturias, Madrid, Castilla-La Mancha, Andalucía, Cataluña, Madrid, Navarra y el País Vasco. Y sus sueños de verano se expanden por un pueblo que en 1965 contempló con asombro la elevación de la gigantesca chimenea de la central térmica, que a punto está de ser desmantelada, y en 1997 se convirtió en el primer sitio de España con una iniciativa para dar la oportunidad a personas con discapacidad de relacionarse y compartir actividades con otras que no las tienen y dar un respiro a las familias.

En este tiempo se ha ensanchado la idea de la inclusión y Cubillos del Sil, de la mano de Aspaym Castilla y León, «ha marcado la tendencia», como señala Roberto López, el coordinador del campamento. «Se han conseguido muchas cosas, pero queda mucho por hacer en ocio y discapacidad», añadió.

Veintidós años después «aún son muy pocos los campamentos inclusivos», señaló. Y aún en 2019 se asiste a situaciones discriminatorias como la ocurrida recientemente en un campamento, en el que una niña fue expulsada debido a su discapacidad. «Es una pena que en estos momentos aún no se respeten los derechos de las personas con discapacidad», subrayó.

De los 120 niños y niñas, 61 viven día y noche en El Bosque de los Sueños, 30 sin discapacidad y 31 con discapacidad, y el resto se suman desde Cubillos del Sil y pueblos aledaños. «Nos reciben con los brazos abiertos», apostilla.

Diego Conde es estudiante de Física, de Valladolid, y cumple su tercer año como monitor en el campamento inclusivo de Aspaym. Cuenta que tres días antes del inicio, profesionales y voluntariado ya están en Cubillos del Sil para preparar el terreno y formarse. «Hay que practicar el traspaso de silla a cama, primeros auxilios, movilizaciones, evacuación», explica. Empezó con Aspaym «porque quería conocer el mundo de la discapacidad —tras hacer otros voluntariados en residencias de ancianos y con animales— y en cuanto termina el verano ya pienso en el año que viene», comenta.

Este año está de manera especial con tres chicos, uno con discapacidad y los otros dos sin discapacidad. «Entre ellos se ayudan. Al que no puede le ponen las zapatillas y luego se suben en la parte de atrás de la silla y va moviéndose más rápido», explica. De esta manera, interactúan de forma totalmente natural.

«Aquí somos todos una gran familia, todos ayudan a todos y hay un ambiente de solidaridad», explica el monitor. Los karts, la noche de terror y la ginkana del agua son algunas de las actividades preferidas por la tribu que estos días habita El Bosque de los Sueños de Cubillos del Sil.

La principal salida fuera del pueblo es a Cabañas Raras, para los karts. Diego Conde también destaca la solidaridad del pueblo. El monitor anima a que otros niños y niñas se apunten para disfrutar de esta experiencia única. «Habrá listas abiertas», recalca.

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