el marisco por bandera

El Mesón La Rueda regresa renovado y con las pilas cargadas para afrontar un último trimestre del año donde los mariscos frescos, el pescado y las carnes de vacuno lideran una oferta gastronómica de calidad, variada y con un sabor muy característico. Abierto de jueves a martes —los miércoles cierran por descanso— cuentan con numerosos platos estrella, aunque las ancas de rana sobresalen por encima del resto. Una propuesta que gana cada día más ‘adeptos’.

También merecen mucho la pena cualquiera de sus mariscos, la lubina asada, el lechazo, entrecot, solomillo y el cabrito (este por encargo), entre otros muchos. Todo ello en una carta selecta y amplia donde caben los buenos entrantes, pescados, mariscos y carnes, sin olvidar sus exquisitos postres caseros marca de la casa. En cuanto a las raciones, son especialmente recomendables el pulpo, los chipirones, las mollejas, los callos, los calamares o sus embutidos.

El Mesón La Rueda es uno de los establecimientos de la capital leonesa con mayor demanda. Su experiencia entre fogones, el buen trato con los comensales, la comodidad de sus instalaciones y la calidad del género explican parte del éxito. La otra se entiende porque aquí nadie se detiene sino que su cocina internacional se actualiza constantemente.

Además de su carta, La Rueda cuenta con menú diario entre semana a 11 euros y los fines de semana a 20 euros. «Siempre tenemos varios primeros y segundos a elegir, además del postre y la bebida», señala Manuel, responsable de este restaurante.

Mención aparte merecen sus vinos denominación de origen. La Rueda tiene capacidad para acoger a 60 comensales en un amplio y confortable comedor al que se suma una zona de bar —donde sirven una gran variedad de tapas con cada consumición— y la terraza cuando el tiempo lo permite.