La peor semana de Urgencias por culpa del calor. 2.800 personas atendidas y el doble de fallecidos

Más de 2.800 personas fueron atendidas en el servicio de Urgencias del Caule la semana del 18 al 24 de julio. El exceso de calor que se vivió en  esos días y los precedentes pusieron al servicio más que al límite, puesto que a partir de las 2.500 urgencias el sistema empieza a tener a tener dificultades de atención , apunta Saúl Escudero, jefe de este departamento en el Hospital de León.

El calor está detrás del exceso de la afluencia a Urgencias en la semana señalada, que empezó con 37 grados centígrados de máxima el 18 y alcanzó los 40ºC el 24, aunque las mínimas más altas, de 21 y 20ºC, se dieron el 21 y 22 de julio. «Muchas personas, sobre todo enfermos crónicos, sufrieron descompensaciones de sus patologías por efecto del calor», indicó Escudero.

«Hemos tenido la peor semana de la historia en Urgencias, ni siquiera en la época de la gripe hemos alcanzado tal número de urgencias aunque se han alcanzado las 2.700 en una semana», añadió.

El calor también ha disparado la mortalidad en el mes de julio. Según los datos publicados ayer por el Instituto de Salud Carlos III en MoMo —Sistema de Monitorización de la Mortalidad diari a por todas las causas— en el mes de julio se han producido 54 muertes debido a las altas temperaturas, sobre 27 en el mes de junio por la misma causa. El año pasado no se notificaron por exceso de temperaturas en estos dos meses y hubo 12 fallecimientos en agosto por causa del calor.

Las personas mayores de 65 años son las que más han sufrido la mortalidad a causa del calor. Según MoMo, en la provincia un total de tres personas de 65 a 74 años fallecieron a causa del calor, otras siete tenían entre 75 y 84 años y el resto eran mayores de 85 años.

En Castilla y León el número de muertes atribuidas al exceso de temperatura en julio ascendió a 334, más del doble que en junio cuando se alcanzó la cifra de 124, según las estadísticas de MoMo.

En España, el exceso de mortalidad por el calor en julio fue de 2.124 defunciones sobre 830 en el mes de junio.

Protegerse ante las temperaturas excesivas que se viven también esta semana —León es una de las 34 provincias en riesgo por calor— obliga a incorporar nuevos (algunos viejos) hábitos de vida para evitar contratiempos y consecuencias fatídicas de un golpe de calor.

Sacyl Castilla y León tiene en su página web una serie de recomendaciones para afrontar lo que va camino de convertirse en la normalidad del verano. La primera de todas: evitar salir de casa en las horas centrales del día, entre las doce del mediodía y las seis de la tarde. Beber más líquidos, sobre todo agua y zumos ligeramente fríos y evitar el alcohol y las comidas copiosas y calientes son otros de los consejos que ofrece la Consejería de Sanidad.

«Evitar la exposición al sol sobre todo de personas que no puedan quejarse, como niños y ancianos», también es una prioridad ante la nueva climatología estival, apunta el urgenciólogo leonés Saúl Escudero.

Las personas con enfermedades crónicas (hipertensión, diabetes, cardiopatía, obesidad, alcoholismo) también deben cuidarse o ser cuidadas de modo especial ante las  olas de calor .

El servicio de Urgencias que, ya de por sí, está acostumbrado a la presión de la época estival, debido al aumento de población desplazada a la provincia, recuerda que antes de acudir a las urgencias hospitalarias se debe consultar con los equipos de salud de Atención Primaria. «Hay casos que no requieren atención hospitalaria y restan recursos a personas que sí los necesitan», precisa el jefe del servicio.

Las previsiones de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) señalan la jornada de hoy como la más calurosa dentro de los tres primeros días de la semana, con temperaturas máximas de hasta 36 grados centígrados. La ola de calor se vivirá en toda la provincia —ayer las zonas más afectadas fueron el sur y la zona más occidental del Bierzo— y será más intensa en Zamora, Salamanca, Valladolid y las zonas de Ávila y Segovia limítrofes con Madrid.

El miércoles, las altas temperaturas darán un pequeño respiro a la provincia de León como en general al norte y oeste de la península. En la capital hay probabilidad de hasta el 50% de lluvias y de hasta un 70% en Ponferrada al mediodía.

Se trata de la tercera ola de calor en lo que va de año después de la vivida entre la segunda y la tercera semana de julio y otra en junio. Se prevé que las temperaturas subirán entre 5 y 10 grados por encima de lo habitual para la época. Ayer se alcanzaron 38 grados en Villafranca del Bierzo y Ponferrada, 37 en La Bañeza y León capital y 35 en Villablino..