Diario de León

Día Mundial del Síndrome de Down

La receta inclusiva de una botica leonesa

Las personas con síndrome de Down celebraron el Día Mundial con el lema #GraciasPorTanto al que León se sumó con un acto institucional y diversas iniciativas que marcaron la diferencia como un valor inclusivo. Como la farmacia Martín-Granizo que acaba de incorporar a Eva para prácticas de comercio.

Eva Sánchez y Águeda Anel delante del robot que organiza los medicamentos en la botica.

Eva Sánchez y Águeda Anel delante del robot que organiza los medicamentos en la botica.

León

Creado:

Actualizado:

Las personas con síndrome de Down, como Eva, nacen con más ADN que el resto. Una copia extra del cromosoma 21 o de una parte, en vez del par habitual, les hace diferentes. Lograr convertir esa diferencia en una riqueza para la sociedad, en lugar de lastrar la vida de las personas Down es el reto que en las últimas décadas se ha fijado el movimiento Down España y Amidown en León.

Ayer dieron las #GraciasPorTanto. Sheila, Mario e Ignacio, tres jóvenes leoneses con síndrome de Down, fueron la voz de sus compañeros y compañeras en la celebración. «Gracias a nuestras familias que son nuestro motor: sin ellos no habríamos logrado todo lo que hemos conseguido», dijo Sheila.

«Gracias a mis compañeros y compañeras que nos apoyan en el día a día», añadió Mario. «Gracias a Amidown que nos apoya para que sigamos creciendo y avanzando en nuestra autonomía, en la búsqueda de empleo y nuestra independencia», dijo Ignacio. La voz de las personas con Síndrome de Down también se alzó en la jornada para dar las gracias «a los empresarios y empresarias por perder el miedo a lo desconocido que nos han dado una oportunidad».

Águeda Anel Martín-Granizo es una de esas empresarias. Madre de una niña con síndrome de Down, Cristina, sabe de la importancia, y de la riqueza, de incorporar la diferencia como un valor en la vida. «Por mi trabajo apenas puedo ir a la asociación y quería colaborar de alguna forma», explica.

A través de la Fundación Once y de Amidown ha acogido en prácticas en la farmacia Martín-Granizo a Eva Sánchez, una joven de 23 años que se forma en Operaciones básicas de Comercio y Hostelería. Dos días por semana, desde las 10.00 a las 13.30, Eva aprende a envasar esencias, colocar medicamentos en el robot que los deposita en la estantería y otras tareas relacionadas con la parafarmacia. Acaba de empezar y está entusiasmada. «Me gusta todo», afirma. Las tres horas y media de la mañana se le pasan volando y disfruta de forma muy especial la hora del café. Tiene un sabor especial... por la conversación, confiesa Eva.

Inclusión laboral
Eva realiza prácticas los lunes y miércoles por la mañana en la botica y parafarmacia

Eva empezó su etapa escolar en la «guarde» de Guardo, donde nació y, ya en León, fue alumna del colegio público González de Lama y del IES Giner de los Ríos. Los mejores recuerdos del cole son de «los amigos, y compañeros y profes que me ayudaron con la lectura fácil», cuenta.

La lectura fácil es un método con pautas y recomendaciones para hacer accesible la información a todo el mundo y de modo especial a las personas con dificultades de comprensión lectora. Los colectivos inclusivos abogan por incorporar este método no sólo a las oposiciones para personas con discapacidad intelectual, sino a la vida pública en museos, comercios, calle... como garantía de inclusión.

Mónica Alija se emocionó al explicar ‘Proyecto 21’. MARCIANO PÉREZ

Mónica Alija se emocionó al explicar ‘Proyecto 21’. MARCIANO PÉREZ

Águeda Anel escucha atentamente y recoge el guante. «A lo mejor en la farmacia podemos poner cosas de lectura fácil», comenta la farmacéutica, que es la tercera generación de este botica fundada por su abuelo. «Animo a todos los comercios a que se sumen a esta iniciativa y cojan a alguien en prácticas con síndrome de Down», apunta.

«Igual que a mí me gustaría que a mi hija le dieran una oportunidad como a Eva, yo también puedo dársela a otras personas», apunta en su doble papel de madre y empresaria.

La vida con sonrisa
«Somos nosotros los que tenemos que dar las gracias a las personas con síndrome de Down»

Eva se preparará en lectura fácil las oposiciones a personal subalterno de la Junta de Castilla y León destinadas a personas con discapacidad intelectual, su próximo reto. Mientras tanto, el aprendizaje de funciones básicas en la farmacia, sus clases de comercio, la musicoterapia, el deporte y el teatro llenan su vida en la que día a día da un paso hacia la autonomía y la independencia.

Las prácticas son tuteladas y en estas primeras semanas va acompañada de Jéssica, pero, poco a poco, se irá soltando, lo mismo que va sola desde su casa a la sede de Amidown por las tardes, andando o en el bus.

La flor amarilla simbolizó la gratitud Amidown. MARCIANO PÉREZ

La flor amarilla simbolizó la gratitud Amidown. MARCIANO PÉREZ

Eva espera encontrar trabajo algún día. Vive el presente, cumple las rutinas, incluidas las tareas que comparte en casa, y como cualquier hermana tiene sus peleas con los suyos, una chica de 19 y un chico de 15 al que, cuando era pequeño, le ayudó a dar sus primeros pasos y hasta le ayudaba con los deberes. Y otra cosa importante para Eva es que el Barça gane... Es una culé de pro.

Ayer, las personas con síndrome de Down dieron las gracias por todo lo que han conseguido en la sociedad. Eva quiso agradecer el apoyo «a mis padres, a mis hermanos y a toda la familia que tengo por el mundo». «Nosotros les tenemos que dar las gracias a ellos. En mi casa, nuestra vida no sería tan divertida sin Cristina», puntualiza Águeda Anel.

tracking