Diario de León

La ARMH ve peligrar la continuidad del laboratorio de Ponferrada y busca financiación extranjera

El vicepresidente de la asociación defiende la importancia de estas instalaciones por las que han pasado cerca de 200 cuerpos exhumados desde que abriera sus puertas en 2008

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V. Silván/ ICAL

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El vicepresidente de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH), Marco González, alertó hoy del posible cierre del laboratorio que la asociacion tiene en el Campus Universitario de Ponferrada (León), donde se realiza el estudio arqueológico y antropológico de los restos exhumados. Los motivos obedecen a la falta de recursos después de que el Gobierno central retirara sus ayudas en 2012.

 

Así, señaló que ahora los esfuerzos de la asociación se centran en la búsqueda de financiación fuera de España, para poder realizar los trabajos en 41 fosas, de las que ya disponen información bastante concreta para ser exhumadas. «Estamos presentando proyectos al Ministerio de Asuntos Exteriores para programas de derechos humanos, también programas de la Comisión Europea y a varias universidades extranjeras, como es la universidad de Nueva York que ha demostrado interés en este tema», puntualizó González, que lamentó la falta de sensibilidad del Gobierno de Mariano Rajoy con las víctimas del franquismo, con la retirada de las ayudas y sin proponer algún mecanismo alternativo de colaboración.

 

El vicepresidente de la ARMH destacó la importancia del laboratorio de Ponferrada, el único propio de la asociación -están funcionando otros dos, el de la Universidad Autónoma y el de Francisco Echevarría-y que abrió sus puertas en 2008. Desde entonces cerca 200 cuerpos han pasado por estas instalaciones, procedentes de fosas de todos los rincones de España, con el objetivo principal de darles una identidad y devolvérselos a sus familiares. «Nos costó mucho conseguirlo», puntualizó.

 

En este sentido, destacó el valor didáctico que ha tenido el laboratorio y el trabajo realizado por la asociación en estos años «casi autodidácta», ya que en España no existía un protocolo de actuación en este tipo de exhumaciones hasta que en 2010 se aprobó el protocolo para exhumación de víctimas de la Guerra Civil, apostilló González, precisamente basado en la experiencia de la ARMH. 

 

«Hay que defender todo el conocimiento que hemos acumulado en este tiempo y agotaremos hasta el último cartucho para que esto no se cierre», aseguró el vicepresidente, que recordó que desde noviembre del año pasado ninguna de las personas que están en el laboratorio perciben un salario, una situación «insostenible» por mucho tiempo más. Así, a pesar del gran respaldo que reciben de su grupo de voluntarios a la hora de realizar las exhumaciones, recordó que hay que alquilar cierta maquinaria como excavadoras o georrádar «que cuesta dinero», lo mismo que realizar los análisis de ADN. «Ahora solo disponemos de los fondos propios, que son las cuotas de los asociados, y las donaciones», concluyó.

 

momentos la asociación tiene 41 fosas con información bastante concreta para ser exhumadas, algo que hace lentamente, debido a la falta de recursos. Además, dice la ARMH, peligra el laboratorio de estudio de restos que tiene en Ponferrada y que puede que tenga que cerrar en poco tiempo debido a la falta de financiación.

 

En la ONU

 

Desde la ARMH informaron también sobre la reunión mantenida la semana pasada con el Grupo de Trabajo sobre Desaparición Forzada e Involuntaria, dependiente del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, que instó al Gobierno de España a buscar a las víctimas del franquismo.Y es que la asociación española apareció por primera vez en el informe anual que elabora este grupo después en 2002, después de que viajará hasta Ginebra en agosto de ese año para presentar los primeros 64 caso de desaparecidos por la represión de la dictadura de Franco,

 

En esa reunion,  diferentes expertos en identificación genética, exhumaciones, en la Ley de la Memoria o académicos denunciaro la falta de enseñanza de derechos humanos y expusieron a los dos miembros del grupo la falta de responsabilidad que han mantenido todos los gobiernos de España desde el final de la dictadura hasta la actualidad. En ese sentido, la asociación, formada fundamentalmente por familiares de «asesinados» y desaparecidos, celebra que la ONU reclame al Gobierno español medidas reparadoras, que abran las puertas de la justicia, y que no sea como hasta ahora, que las familias han tenido que buscar ayuda para auto repararse.

 

La ARMH puso a su disposición toda la información que han generado las más de 150 exhumaciones que ha llevado a cabo desde octubre del año 2000 y también trasladó la urgencia que tiene la búsqueda de los desaparecidos, «puesto que muchos de los familiares que piden ayuda tienen una edad avanzada, y no pueden esperar mucho tiempo a que el Gobierno cumpla sus deberes en materia de derechos humanos», al tiempo que entregó copias de las numerosas denuncias presentadas en diferentes juzgados  y que, de momento, han sido ignoradas.

 

Por otro lado, el grupo de la ONU también solicitó al Gobierno español su colaboración con la justicia argentina, en la causa abierta por la jueza María Servini de Cubría, en la que han sido reclamados dos miembros de la Brigada Político Social «que torturaron a decenas de jóvenes opuestos a la dictadura franquista». La ARMH promovió esa denuncia el 14 de abril de 2010, tras ver que las puertas del Poder Judicial español estaban cerradas para las víctimas de la dictadura del general Franco.

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