orallo, UN BOSQUE PARA LA ESPERANZa
La localidad de Orallo, ubicada en la comarca de Laciana, realiza un proyecto llamado Bosquiterio, con el que pretenden regenerar la escombrera del desaparecido establecimiento minero Grupo Peñas.
Más de seiscientas personas decidieron apadrinar un árbol en la vieja escombrera, aunque tan solo un 80% de lo plantado logró sobrevivir a las condiciones climáticas y geográficas.
Cinco kilómetros más allá de Villablino se encuentra Orallo de Laciana, en la comarca nombrada Reserva de la Biosfera. Tras la cierta desolación acaecida por el cierre de las minas allí localizadas, su junta vecinal decidió el pasado mes de mayo crear una iniciativa completamente nueva. Bajo el nombre de Programa Bosquiterio —formado a partir de las palabras bosque y cementerio— pretendía restaurar la escombrera del antiguo establecimiento minero Grupo Peñas.
La intención estaba clara y así lo explicaban en su día desde la localidad. «Esperamos que la restauración de la escombrera de Peñas se convierta en algo más que una nueva zona de senderismo o una pequeña mejora del medioambiente y del paisaje de nuestro pueblo. Queremos que nuestros vecinos y amigos participen y se unan a las nuevas iniciativas de desarrollo sostenible que estamos planificando, de modo que ayuden a dinamizar la economía, la sociedad y la cultura de un pueblo agrícola y minero que se muere».
Mediante el micropatrocinio, los participantes donaban el dinero suficiente —15 euros— para que la organización plantase un árbol en el terreno anteriormente citado. Esta planta se bautizaba con el nombre elegido por su ‘padrino’, a quien posteriormente se le enviaba la fotografía y ubicación de su pequeño retoño. Además, cada participante tenía también la posibilidad de ser nombrado ‘vecino honorario de Orallo’ —10 euros— con la opción de integrar un censo público de vecinos del Bosquiterio y ser reconocido en una ceremonia pública celebrada el día de la fiesta del árbol. Otra posibilidad diferente y también más cara —500 euros— es ser protagonizar uno de los bloques que integran el Muro del Bosquiterio.
Este proyecto está creciendo hacia nuevos horizontes. Con más de 600 árboles plantados y un 80% de ellos prendidos, «se ha logrado comenzar a recuperar una zona tan degradada», según palabras del presidente de la junta vecinal. Como él mismo comenta, están a punto de iniciar una segunda fase en la que «con la colaboración de los Forestales de Ponferrada y la Universidad de León, se tratará de acondicionar una parte para favorecer la recuperación vegetal de la zona». En definitiva, se quiere «dar a conocer que los proyectos rurales aún se pueden recuperar y que también funcionan».
Bosquiterio realizará una nueva plantación el año que viene, pero será en fechas diferentes ya que según la organización «es más fácil que haya agua en abril o marzo —los meses que se barajan para la próxima ocasión— que en mayo, cuando se realizó la primera plantación».
MIRIAM BADIOLA