Diario de León

Día para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer

Vídeo | La lucha contra el machismo se centrará en los menores por su nula percepción del control

León no tiene víctimas adolescentes desde 2013 pero la violencia de género ha dejado dos huérfanos en esta etapa

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Las administraciones públicas, en el marco de sus respectivas competencias, impulsarán campañas institucionales específicas con el fin de prevenir las violencias sexuales tanto en el ámbito público como en el privado. Estas campañas estarán orientadas, en particular, a combatir los estereotipos de género y falsas creencias que presuponen a las mujeres responsables de su propia seguridad y de la violencia que sufren, de acuerdo a los datos. Serán dirigidas a hombres, adolescentes y niños para erradicar los prejuicios basados en roles estereotipados de las mujeres y los hombres, así como para contribuir activamente en la prevención de todas las formas de violencia recogidas en la nueva Ley de Garantía de la Libertad Sexual, que se encuentra en fase de anteproyecto para su aprobación en el Congreso.

Un estudio realizado por la Delegación del Gobierno para la Violencia de Género refleja que la adolescencia y la juventud tienen una especial dificultad para reconocer como violencia de género, la denominada violencia de control.

Dada la especial relevancia que este tipo de violencia tiene entre la adolescencia, el estudio incluye indicadores que prestan una especial atención a las distintas formas de control y dominio, tanto presencial como a través de las nuevas tecnologías.

La exposición a la violencia de género de la madre tiene graves consecuencias en el desarrollo de los menores, incluyendo entre sus secuelas: problemas emocionales, conductuales, físicos, sociales y académicos. Conviene tener en cuenta, sin embargo, que en casi todos los estudios se detectan casos, que pueden llegar al 40%, en los no se observan secuelas. León no ha registrado muertes de menores por violencia de género, pero dos menores quedaron huérfanos en este periodo en la provincia. Las campañas se realizarán de manera que sean accesibles a toda la población. Para ello, tendrán especial divulgación en los medios de comunicación de titularidad pública y en los centros educativos, sociales, sanitarios, laborales, culturales y deportivos. La ley en ciernes impulsará campañas generales de información dirigidas a mujeres de todas las edades, que incluyan información sobre sus derechos y los recursos disponibles en caso de sufrir violencia sexual, asegurando que dichas campañas son accesibles a todas las mujeres tomando en consideración circunstancias tales como la discapacidad, el idioma, la edad, la ruralidad o la eventual residencia en el extranjero de nacionales españolas.

Condición de riesgo

Los resultados obtenidos en 2013 volvieron a poner de manifiesto, como se encontraba en 2010, que desde la adolescencia la principal condición de riesgo de violencia de género es la mentalidad sexista basada en el dominio y la sumisión, mentalidad que la prevención debe erradicar.

Esta es una de las principales conclusiones del conjunto de resultados obtenidos en el estudio de 2013. Sus resultados llevaron a destacar como principales condiciones de riesgo de las conductas de maltrato que los chicos afirmaron haber ejercido en el contexto de relaciones de pareja con una chica la justificación de la violencia de género y del dominio y la sumisión en la familia, evaluadas a través del acuerdo con siete opiniones que generan hoy un gran rechazo social en más del 90% de adolescentes. La justificación del sexismo y de la violencia como reacción a una agresión, dos problemas que forman parte de una misma dimensión, evaluada a través del acuerdo con seis frases, rechazadas por la mayoría pero con las que estuvo de acuerdo más del 20% de adolescentes. Los consejos escuchados a las personas del entorno, en los que predominan mensajes de dominio y violencia con inferior presencia de los mensajes de igualdad y no violencia. Una menor autoestima, evaluada a través de la escala de Rosemberg, la más empleada internacionalmente para evaluar esta variable.

Violación de derechos

En su expresión física y también simbólica, las violencias sexuales constituyen quizá una de las violaciones de derechos humanos más habituales y ocultas de cuantas se comenten en la sociedad española, afectando de manera específica y desproporcionada a las mujeres. Las violencias sexuales vulneran el derecho fundamental a la libertad, a la integridad física y moral, a la igualdad y a la dignidad de la persona.

Estas violencias impactan en el derecho a decidir libremente, con el único límite de las libertades de las otras personas, sobre el desarrollo de la propia sexualidad de manera segura, sin sufrir injerencias o impedimentos por parte de terceros y exentas de coacciones, discriminación y violencia. No todas las mujeres se enfrentan desde la misma posición a las violencias sexuales ni tienen las mismas oportunidades de obtener una respuesta adecuada en su búsqueda de apoyo, protección y justicia.

La discriminación por motivos de género está unida de manera indivisible a otros factores de discriminación como el origen racial o étnico, la orientación sexual, la identidad y expresión de género, la clase social, la situación administrativa de residencia, el país de procedencia, la religión, la convicción u opinión, la discapacidad, la edad, el estado civil o cualquier otra condición o circunstancia personal, económica o social. Los últimos estudios ratifican el carácter creciente de esta tendencia.

Violación y abuso, lo mismo

Como medida relevante, en la nueva ley se elimina la distinción entre agresión y abuso sexual, considerándose agresiones sexuales todas aquellas conductas que atenten contra la libertad sexual sin el consentimiento de la otra persona, cumpliendo así España con las obligaciones asumidas desde que ratificó en 2014 el Convenio de Estambul.

Esta equiparación, además de atenuar problemas probatorios, evita la revictimización o la victimización secundaria.

 

 

Vídeo: L. DE LA MATA

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