El Ayuntamiento de León notifica casa a casa la tasa de Gersul aún pendiente de sentencia
Facua recomienda pagar, pero presentar recurso contra la liquidación ante la inseguridad jurídica. El consistorio, que paró la nueva ordenanza a la espera de este fallo, se arriesga a tener que devolver 5,1 M€

El recibo grava el tratamiento de la basura en León.
Con acuse de recibo, puerta a puerta, los vecinos de León han empezado a recibir en sus domicilios una nueva comunicación que hasta el momento sólo habían anotado quienes tienen notificación por sede eletrónica. La remite el Ayuntamiento de León y, bajo los datos del titular, se lee «transferencia, tratamiento y eliminación de residuos», con la apostilla de una data en la que se apunta que se refiere al «periodo 2024, anual», y un cargo de 38 euros lineales para todas las viviendas, pero que en comercios puede llegar hasta los 4.000 euros, en industrias a los 3.000 euros y en oficinas y centros oficiales a los 1.999,8 euros. En total, 5.132.990,7 euros, como se apuntaba en la previsión de ingresos del pasado ejercicio.
Sí. No se trata de una confusión. Ahora, 22 meses después, la administración ha empezado a liquidar la tasa que hasta 2023 gestionaba la Diputación con cargo a Gersul: el mismo tributo que se había derogado por la entrada en vigor de la ordenanza de 2025 y cuyo cobro los servicios de Intervención de la administración municipal consideraban no se «ajustaba a derecho»; el mismo que, con la anulación por parte del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de la ordenanza de 2025, ha conseguido de rebote que vuelva a entrar a vigor; el mismo que se mantiene en interrogante a la espera de que los tribunales resuelvan otro recurso, presentado por un particular y una empresa, en el que se cuestiona que se cobre por metros cuadrados y reclama que se anule.
Con este escenario de incertidumbre, el Ayuntamiento de León ha decidido no esperar más. Los responsables municipales decidieron no volver a tramitar, para que entrase en vigor en 2026, la nueva ordenanza que aúna a las actuales de recogida de basura y de tratamiento, a la vista de que el fallo judicial pendiente pudiera obligarles a devolver los 11.685.014,01 euros de ingresos previstos. Pero, a su vez, han optado por promover el recibo de este segundo tributo, que grava los servicios del CTR de Gersul, pese a que, en caso de nulidad, podría tener que devolver a quienes hubieran reclamado o, si la administración decidiese extenderlo como se hizo con el IBI en 2008, a los 85.586 contribuyentes.
El recurso pendiente hace que desde la organización de consumidores y usuarios Facua se aliente a los 85.586 contribuyentes a que paguen el recibo, pero que recurran ante el consistorio de la capital leonesa la liquidación de la tasa «por los servicios de transferencia, clasificación, tratamiento y eliminación de residuos domésticos y asimilables a doméstico en el término municipal de León». «Seguimos entendiendo que la inclusión en el censo de una nueva tasa, que es el primer acto administrativo fiscal de esa nueva tasa, debe ser notificada en el ejercicio que se pretende cobrar, no un ejercicio después. Si encima hay recursos en marcha con más razón: si la resolución es favorable a quienes recurran, sólo tendrá efectos respecto de quién haya recurrido», conceden desde el colectivo, que incide además en que «mientras no haya una declaración de firmeza de la sentencia del TSJ o un acto de nulidad del Ayuntamiento de la ordenanza 2025, la ordenanza en vigor es la de 2025». «En un estado de derecho no se actúa a las bravas», apostillan desde la organización.
Frente a esta postura, desde la Cámara de la Propiedad Urbana de León prefieren ser más cautos. En una comunicación enviada a todos sus asociados, apuntan que «los recibos de 2024 por la transferencia, clasificación, tratamiento y eliminación de residuos sólidos urbanos se emiten al amparo de la ordenanza entonces vigente, publicada en el Boletín Oficial de la Provinci de 29-12-2023 y no afectada por la anulación de la ordenanza que regula la tasa de 2025». «Su importe asciende a 38,00 euros por vivienda y es variable en el caso de otros inmuebles. Recomendamos su abono, una vez notificado el recibo (notificación aún en proceso, salvo la realizada en buzón digital) a fin de evitar recargos, apremios o costes adicionales, salvo casos puntuales en los que existan fundamentos», recomiendan desde la organización.
La tasa de 38 € se tiene que notificar con acuse de recibo al ser su primer ejercicio, pero después habrá otra del mismo cargo por este 2025
La tasa por «los servicios de transferencia, clasificación, tratamiento y eliminación de residuos domésticos y asimilables a doméstico en el término municipal de León» ha sorprendido a los titulares de las viviendas, que en su mayoría pagaban por medio de las comunidades de vecinos y no habían recibido nunca este recibo, pero sobre todo a los contribuyentes afectados por locales sin uso o convertidos en cocheras y de industrias cerradas. No se les exigía este pago hasta ahora y, de pronto, les aparecen recibos de hasta 3.000 euros, en función de los metros cuadrados totales.
La reclamación se ajusta al texto de la ordenanza de 2024, en la que se concede que «se entiende de recepción obligatoria el servicio prestado a todas las viviendas, oficinas, comercios, centros oficiales, industrias, etc. que estén en condiciones de habitabilidad o utilización, con independencia de que se encuentren deshabitados o desocupados». «Se considera que no está en condiciones de habitabilidad el inmueble que se encuentra en estado de ruina declarado por este Ayuntamiento», se apunta, a la vez que se recoge que «los locales sin acondicionar se considera que no son susceptibles de utilización cuando no han solicitado licencia de obra o no han presentado declaración responsable en este ayuntamiento».
Pero, de acuerdo a que en la ordenanza se refleja que existe «una presunción de utilización» en el «caso de todos aquellos inmuebles susceptibles de generar residuos domésticos y asimilables a domésticos», han empezado a aparecer afectados que reclaman que no usan el servicio. Sucede, como han aparecido reclamaciones, en aquellos locales que se reconvirtieron en cocheras y en fábricas que llevan cerrados años.