Diario de León
Publicado por
León

Creado:

Actualizado:

La naranja de cera Aquella tarde el maestro había llevado a la escuela una naranja que lo menos tenía cincuenta años y todavía no se había descompuesto. Los niños conocían esta fruta artificial, la habían visto en el aparador del señor maestro, y siempre les había parecido más que naranja, una pelota de celuloíde. No comprendían por qué el maestro había colocado en su tarima la naranja de cera. La Normal De Maestras, de señoritas Maestras va a ser ya el edificio enclavado entre las calles de Pablo Flórez, al final, y la e Serranos, frente a la plazuela de este nombre. Sabido es que allí estuvo la Escuela Normal de Maestros y su graduada, aneja, y los esfuerzos y constantes peticiones para que se acabase de construir el edificio derribado hace años.

tracking