El perro reciclador

Érase una vez un perro que era muy ordenado y limpio. Se llamaba Kas. Un día fue al parque con su amo y se encontró una lata que alguien había tirado al suelo. Averiguó quién había sido y descubrió que era un niño muy maleducado. Kas le dijo: «¡No tires cosas al suelo, que estás ensuciando el medio ambiente!» El niño se quedó pensando y finalmente dijo: «Tienes razón, no debemos tirar cosas al suelo». Kas se puso a recoger basura del parque y el niño le siguió. Pero el perro se cortó con un cristal y el niño lo llevó a su casa para curarlo. Se hicieron muy amigos y desde ese día siempre salían juntos al parque. Un día, el niño fue a buscar a Kas a su casa y le dijo que había quedado con unos amigos para explicarles por qué era tan importante poner cada cosa en el contenedor adecuado para poder reciclar las basuras. Así, les explicó que el contenedor amarillo era para poner los plásticos, el azul para el papel y cartón y el verde para vidrio y les dijo que no se olvidaran tampoco de tirar las pilas usadas en el contenedor adecuado. Formaron una asociación llamada «Salvemos nuestro planeta», y se reunían todas las semanas para hablar de la contaminación y el medio ambiente. Así mucha gente se concienció de que hay que cuidar el planeta, empezando por nuestras casas donde debemos separar las basuras para reciclar. Fin.