Diario de León

Reportaje | luis urdiales

La Coag regresa a Llorente

La postura de Ugal se convierte en clave para que el proceso de unidad que han iniciado UPA y la Coordinadora se traduzca en una realidad en el campo leonés

Sede de la mítica UCL, en Independencia esquina Ordoño.

Sede de la mítica UCL, en Independencia esquina Ordoño.

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León

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Fueron hijos del mismo cuerpo. Quince años después de la catarsis van a realizar un ejercicio de generosidad para hacer posible en León el momento de proximidad que viven las siglas sindicales campesinas que los representan a nivel nacional. Este se antoja como el primer capítulo del reencuentro entre campesinos que lustros después están condenados a entenderse. La UPA, -”Ugal en León-”, y Coag, sindicato que se presenta con Ucale en la provincia, se asoman a un proceso irreversible: unidad de acción, como eufemismo de fusión, de integración, de matrimonio. Un proyecto para el campo con dos marcas, dos sellos, dos sedes, dos referentes, no encaja con el raciocinio cuando la base laboral que lo sustenta cada vez está más disminuida. Este es el principio de una historia que sería incomprensible sin repasar el puzzle sindical de los campesinos leoneses en las dos últimas décadas. Demasiada organización para activos de un colectivo en menguante perenne.

La representación leonesa se calca en la representatividad nacional y regional. Dos modelos: el que unifica Asaja, instalado en el éxito comicio tras comicio, y el que atomizaban siglas y taifas de UPA y Coag.

Nada de lo que ocurra en Castilla y León dentro del proceso de proximidad -”casi de reconocimiento de consanguinidad-” que capitalizan UPA y Coag va a tener éxito sin tener en cuenta la particularidad de la provincia leonesa. Ugal se erige en la única facción capaz de seguir a distancia la estela de éxito que marca Asaja de forma reiterada en las últimas consultas electorales. Y además, en quince años de vida, ha cimentado estructuras productivas impensables en los términos de individualismo que siempre definieron la actividad agraria y ganadera en León. Por alusiones, su líder y fundador, su tutela, concede una opinión ajena al protagonismo que va a tener Ugal en el proceso de cercanía entre las matrices Coag y UPA: «Creo que todo el mundo está de acuerdo en que hoy hay demasiada organización, que hace falta unir siglas y proyectos porque lo exige el momento. Ugal, UPA, Coag, defienden un modelo productivo en el campo en el que lo primero es el agricultor profesional, la actividad ligada al entorno y al medio de vida rural, la filosofía de apoyar la producción y no el subsidio, a las explotaciones familiares, al sistema que garantice una actividad rentable del campo», resume el secretario de Ugal, a efectos oficiales agente de UPA en León y clave en el proceso de unión de este sindicato con Coag en Castilla y León y en el resto de España.

Allá lejos se apagaron los rescoldos de la guerra fratricida entre compañeros de carné sindical, de movilizaciones y barricadas al pie de vías de tren y carreteras infames, de mítines y arengas sin más ayudas que un megáfono y sin más púlpito que un simple remolque que hoy no encontraría ni sitio en el museo figurado de la agricultura leonesa. Así se dio contenido a la historia de la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos, en León alias UCL ; la misma Coag que vuelve a llamar a la puerta de Llorente.

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