Diario de León

Mercedes AMG GT. De la pista… a la calle

El ‘deportista’ de Affalterbach acentúa su perfil ‘de carreras’ . Desde hace cuatro años, el AMG GT ha buscado la ‘confrontación’ con los demás deportivos de todo el mundo. Además de diversas actualizaciones exteriores, los coupé y roadster incorporan el sistema de control dinámico, también otras terminaciones interiores de carácter marcadamente ‘racing’.

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El ‘deportista’ de Affalterbach… acentúa su perfil. La versión limitada GT R PRO eleva la deportividad a la enésima potencia: prestaciones dignas de un ‘bólido’ de carreras, optimizada relación peso/potencia, nuevo tren de rodaje, perfeccionamiento aerodinámico, asientos anatómicos de construcción ligera… dinamismo de conducción. Para sus realizadores, «ningún modelo de serie de Mercedes-AMG está tan cerca del automovilismo deportivo como el nuevo GT R PRO».

A imagen y semejanza del GT 4 Puertas Coupé, la nueva arquitectura telemática permite incorporar de serie un nuevo visualizador del cuadro de instrumentos (12,3 pulgadas) completamente digital, que puede personalizarse en tres estilos: «Clásico», «Deportivo» y «Supersport», esta última añade a los datos habituales una información específica AMG «Shiftlight», como ‘invitación’ a cambiar a una marcha superior en el modo manual del cambio de marchas, modo inspirado en las carreras. También se monta otro visualizador (10,2 pulgadas) en la consola central.

A la izquierda del volante, el botón «Touch Control» permite visualizar la información en el lado izquierdo o derecho del cuadro de instrumentos: representación clásica con velocímetro y cuentarrevolusiones, informaciones de navegación, conducción o datos del motor; los conductores más ‘ambiciosos’, pueden incluir información sobre aceleración «G-Force» o las cifras de potencia y par/motor.

No sólo ‘serlo’… El AMG GT PRO no sólo se conduce como un coche de carreras, también tiene ‘ese’ aspecto: fibra de carbono en el ‘splitter’ frontal, aletines, listones de adorno en los faldones laterales y difusor de fibra de carbono, material que se utiliza en su techo de nuevo diseño, rebajado en su zona central.

Sus 585 CV le permiten ‘sprintar’ de cero a cien en 3,6 segundos, alcanzar una punta de 318 por hora y homologa 12,4 litros de consumo medio por cada centenar de kilómetros.

Las demás versiones (GT, GT S y GT R) aceleran de cero a cien en 4,0; 3,8 y 3,7 segundos respectivamente, con puntas entre 304 y 317 por hora y consumos homologados entre 11,4 y 12,5 litros de media.

Antes de su estreno mundial el GT R PRO, pilotado por Maro Ángel, marcó 7.04,621 minutos en una vuelta al ‘Infierno Verde’ de Nürburgring, pulverizando así el récord registrado por el AMG GT R.

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