León respira un aire aceptable
Por quinto año consecutivo, ni la provincia ni la Comunidad alcanzan niveles preocupantes, según la Junta. . El estudio de la calidad del aire se centra en la capital, La Robla y el Bierzo como zonas más problemáticas.
El Bierzo es una de las zonas más contaminantes por su actividad industrial.
Con un ‘no’ escrito en letras mayúsculas, para que quede más claro todavía, el informe sobre la calidad del aire correspondiente a 2012 concluye que el año pasado «en ningún momento» se han superado los niveles máximos de dióxido de azufre, ni de partículas en suspensión, ni de dióxido de nitrógeno, las tres mediciones más fiables para valorar el grado de contaminación atmosférica en los puntos más problemáticos de la Comunidad y, por extensión, en la provincia leonesa, que son la capital, el entorno de La Robla y el Bierzo, estos dos últimos por la presencia de centrales térmicas de carbón.
En el estudio de la Consejería de Medio Ambiente y Fomento, hecho público ayer en la web de la Junta, se destaca también que ya es el quinto año consecutivo que no se han superado los valores límite de protección para la salud. «Además, se ha registrado un claro descenso en los contaminantes que habitualmente presentaban los valores más elevados, estando la mayoría de ellos y en casi todo el territorio, entre los umbrales superior e inferior de evaluación», se explica.
En cuanto al SO2 (dióxido de azufre), se registra una tendencia que viene siendo habitual en los últimos años. Y es que en las zonas alejadas de los grandes focos de emisión (las centrales térmicas de carbón), los valores se sitúan muy por debajo del valor límite. Es en éstas últimas -La Robla y Bierzo- donde sube la presencia, aunque lejos de haber sido un problema el año pasado. Así, en la localidad roblana no hay ningún valor límite y en el caso del Bierzo sólo una medición en la estación del albergue de peregrinos de Ponferrada, cuando el nivel de alerta se establece a partir de 24 ocasiones.
Las partículas en suspensión, tanto en PM10 como PM2.5, otro de los datos a tener en cuenta, tampoco han registrado superación alguna de los valores límite en ningún punto de la provincia de León.
En este sentido, La Robla es uno de los puntos más analizados, y donde se detecta una mayor presencia. El valor límite diario se ha superado hasta en seis ocasiones en una de las estaciones de control. Respecto al arsénico, cadmio y níquel, La Robla tiene también el registro más elevado junto con Palencia.
En el informe también se estudia la aglomeración de ozono. El valor objetivo para la protección de la salud no debe superar los 25 días por cada año civil de promedio en un periodo de tres años. En la provincia nadie lo supera para convertirse en un problema.