Casi un mes de cuarentena en Italia para Ángela Salvadores

A casi 1.800 kilómetros de León está viviendo la baloncestista leonesa Ángela Salvadores la pandemia de coronavirus. Precisamente en un país y una zona azotada por esta crisis sanitaria como la localidad italiana de Bolonia. Allí viajaba el verano de 2019 para fichar por la Virtus con la que estaba firmando una Liga sobresaliente que se veía cortada de raíz hace poco menos de un mes cuando el país transalpino decretaba el estado de alarma y el confinamiento de la población. Una medida que ha llevado a Ángela a tener que recluirse en su piso desde el 9 de marzo. Y allí pasar los días con la incertidumbre de una tragedia que se ha cobrado miles de víctimas. «Ni lo voy a negar. En todo este tiempo he pasado días bastante malos. Yo estaba acostumbrada a entregar y jugar y de la noche al día ha cambiado todo. Es una situación difícil que a nivel mental también te marca No poder salir de casa es duro pero también comprobar lo que está pasando a nivel sanitario a la sociedad», apunta le leonesa».

Para Ángela, «no obstante intento pasarlo lo más aceptable posible. Los días son largos e intento aprovechar cada momento. Además de entrenar también empleo el tiempo en salir al pequeño jardín que tengo y en estudiar Magisterio. Mejorar en mi italiano e incluso también me he inscrito en un curso de la Universidad de Harvard. Lo de entrenar además de para mantener el tono físico también tiene como fin el poder cansarme y así ir por la noche a la cama y poder dormir porque a veces los nervios generados por esta situación te lo hacen difícil».

En el caso mes que lleva confinada en su casa apenas ha salido de ella. «Trato de cumplir las directrices que nos han dado y creo que sólo lo he hecho tres veces. Y eso para comprar comida porque aquí las restricciones son también importantes».No poder estar con su familia es también una situación que le afecta. «Hablo con ellos todos los días. Menos mal que a día de hoy tenemos teléfono y otros medios para hacerlo», apunta. Y añade. «Cuando estás sola y fuera de tu casa estas situaciones son bastante estresantes».

Precisamente ayer mismo conocía la decisión de la Liga de bajar el telón esta temporada. «Hasta ahora no sabíamos nada. La decisión era esperada pero hasta ahora no se había tomado y eso me reportaba mucha incertidumbre. No podía entrenar con el equipo (lo hace en casa con una bicicleta estática, abdominales y unas pesas) ni tampoco poder regresar a León. Ahora tras conocerse esta decisión tendré que hablar con el club para aclarar la situación y volver a casa. Va a ser complicado dado como se han puesto las cosas. Tendré que hablar con la embajada y luego ver como me desplazo. Ojalá todo se arregle bien aunque posiblemente tenga que pasar alguna semana más aquí, apostilla la jugadora de baloncesto que espera reencontrarse pronto con su familia en León.