Diario de León

Hojas de chopo Alfonso García

Cuestión de enchufe

Creado:

Actualizado:

E l enchufe forma parte de nuestra vida. No sé en qué medida, pero importante. No me refiero al que usted ha pensado seguramente como sentido figurado, sino a ese pequeño artefacto con clavija y toma de corriente que se conecta con el otro para establecer una conexión que permita el paso de la fuerza eléctrica. Vamos, el enchufe de toda la vida desde que llegaron las bombillas a la iluminación de las cocinas.

No sé por qué extrañas o no tan extrañas conexiones me vinieron a la mente aquellos tableros caseros con una serie de ganchos o alcayatas en el mejor de los casos en que se colgaban las llaves de las casas familiares, a veces laberínticas, de la ruralidad y sus múltiples actividades. Diversas fórmulas para indicar qué puerta abría cada una: despensa, cuadra, cocina de leña, cubil, aperos… Solo había que devolverlas a su sitio, prácticamente memorizado, para que el orden y la rutina siguiesen marcando, sin alteración, el ritmo de lo cotidiano. Hoy esto es una parte del recuerdo en la mayoría de los casos. Pero se sistematizan otras fórmulas ajustadas a los tiempos que vivimos. Me parece asumida la presencia de múltiples enchufes y aparataje cableado. Y en ocasiones, la regleta que ordena y señala dónde debe ir cada uno, tan dispares en longitudes, formatos y anclajes. A veces una selva confusa de cables que alimentan el teléfono, el ordenador, el reloj conectado a no sé cuántas posibilidades a distancia, la cámara fotográfica —la inmediatez y comodidad del móvil la han arrinconado en buena medida—, el aparato de radio multifuncional que acompaña en los lugares más insólitos…

Seguro que cada cual podrá añadir más posibilidades al asunto. Cinco, cinco son las que cuelgan de las estanterías donde reposan estas que llamo mis conexiones con el mundo, aunque a veces confunda a cuál de ellas corresponda cada enchufe. Por eso, cuando alguien pretende añadir algún elemento más a la “colección” —te vendrá bien para…—, solicito piedad al bienintencionado sugeridor. Ya sé que son las nuevas llaves que abren las puertas de los mundos. Pero, puestos a pedir, solo añadiría otro. Habrá que esperar, sin embargo, a ver cómo evoluciona la Inteligencia Artificial. ¿No sería posible un alimentador de estos para recargar cada mañana nuestras pilas? Solo habría que estudiar por dónde entraría la carga. Y no parece cosa fácil.

tracking