Diario de León

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Partamos de la base DE que el Partido Popular no suele ganar las elecciones generales por méritos propios sino por demérito del contrario. Lo hemos visto en todas las elecciones que ha ganado y la pregunta ¿Por qué? Con José María Aznar, la primera legislatura la logró por un desgaste de corrupción del Partido Socialista: el Gal, Filesa más, entre otros, el director de la Guardia Civil, Luis Roldán. Ante esta situación, Felipe González decidió convocar elecciones generales

El PP venía de una larga etapa de acoso al PSOE, aquella frase del «váyase, señor González» que le lanzó Aznar en el Congreso, que derivó en convocatoria de elecciones. Después de tantas corruptelas, al PP le costó llegar al Gobierno. No consiguió mayoría absoluta, 156 escaños. Ante este pírrico resultado, Alfonso Guerra declaró: después de haber llovido tanto…. Sí, podemos decir que, las siguientes elecciones, Aznar las ganó por mayoría absoluta.

Ante el desastroso Gobierno de Zapatero, convocadas elecciones generales, las ganó Mariano Rajoy, consiguiendo 186 escaños. Nos preguntamos y los votantes del PP se preguntan ¿Qué hizo Mariano Rajoy con una mayoría absoluta? Parece que enderezó la economía, descendió el desempleo y ordenó las cuentas públicas. El resto de las actuaciones y lo que tenía que haber hecho, se quedó entre bambalinas. Hay decisiones que los españoles no perdonan y si siguen votando al PP es por demérito del contrario, en muchos aspectos, la izquierda es peor ya que toma decisiones contra todos los principios constitucionales.

A Mariano Rajoy, le montaron un pollo los catalanes. Le declararon la república catalana. Presto, el Gobierno inició los pasos para revertir a la legalidad lo que había sido un acto de sedición y de vulneración constitucional. Acudió a la oposición para consensuar las medidas a tomar. Aplicación del artículo 115 de la Constitución, suspensión de la comunidad o gestión por el estado de las funciones autonómicas por un tiempo determinado. Nada más. Aquí el Gobierno pecó de endeble, de falta de decisión, de falta de voluntad para solucionar un problema que viene de lejos y que tuvo la oportunidad de poner al Gobierno catalán firme y dar el tiempo necesario para revertir lo que se fraguó durante años por debilidades de todos los gobiernos. Pudo limitar los medios de comunicación, esa TV3 que lanza soflamas contra España y la unidad nacional. Revertir lo concerniente a la obligación de que el castellano es y debe ser la lengua oficial e imponerla, por obligación constitucional en todos los centros. ¿Por qué no actuó el Gobierno con más contundencia? Por debilidad, por complejo. Si esta situación se hubiera dado con Felipe González a los catalanes y al Gobierno catalán lo hubieran puesto firme.

Estamos ante el 28 de mayo. El Partido Popular arrasó en la mayoría de los municipios y conquistó por mayoría absoluta: la Comunidad de La Rioja y Madrid. Hay que destacar Madrid que tiene una presidenta que sabe estar y defender a España, a los españoles y la Constitución y le importa un bledo lo que digan de ella. Cumple con sus obligaciones como estadista, tanto comunitarias como de Estado. independiente de la buena gestión que está haciendo en la Comunidad de Madrid. En Valencia, Extremadura, Murcia, Baleares y Canarias no consiguió mayoría, pero puede gobernar en coalición con otras fuerzas. Aquí, es donde el PP es débil, corto de vista, tiene complejos y actúa bajo el principio de qué dirán. Teme la crítica y que le tachen no sé de qué. Bueno, de ultraderecha, derecha extrema que no sabe que es la cantinela de la extrema izquierda.

Por otra parte, yo me preguntó qué ideología tiene el PP. No se sabe. No se sabe si es, liberal o demócrata cristiano, dice que es centrista, esto no sé lo que es. Es una lástima que un partido que debe ser faro, que alumbra España, como ocurre en la mayoría de los gobiernos europeos que tienen definición ideológica, este Partido Popular no se sabe en qué estamento se mueve.

Ahora, que tiene la oportunidad de Gobernar por muchos años no solo las comunidades autónomas y muchos municipios, sino España, está dando tumbos y, como se dice vulgarmente, puede perder, pan y perro.

Tiene vergüenza a pactar con quienes fueron sus hermanos y se desgajaron. Acaso, Abascal no estuvo en el PP vasco y sufrió él y su familia las consecuencias de terrorismo y ahora que está en otro grupo político, llamado Vox, tiene vergüenza en pactar con el hermano pródigo y solo porque le acusen de: ultraderecha, derecha extrema, cercana al fascismo. Si los resultados hubieran sido a la inversa y fuera el PSOE quien necesitara los votos de los independentistas, filo etarras y toda la camarilla, no hubiera dudado en tomar ya decisiones de pacto, como así fue para elevar al pedestal a Pedro Sánchez Castejón.

Lo que está haciendo el Partido Popular en Extremadura, Murcia no tiene sentido ninguno, solo actúa por el que dirán. Este PP o cambia o le van a comer la parcela y arrebatar la despensa que en este momento la tiene llena o casi llena. Son miopes, corto de vista y si no espabilan ya pueden tomar el camino de regreso.

Vamos a ver, los votantes de Vox ¿No eran votantes de Mariano Rajoy o de Aznar cuando consiguieron mayoría absoluta? De qué va este PP que se avergüenza de su hermano de sangre. Y esto se verá en lo sucesivo. Las oportunidades son únicas. Ahora el PP puede tener todo el poder de la política en sus manos ¿Se avergüenza de pactar con su familia? Mientras el PP no pierda los complejos, no conseguirá la confianza de los españoles. En otro orden, no solo vale que los españoles den la confianza también es importante saber elegir a los protagonistas porque se está demostrando, tanto a nivel autonómico como provincial o municipal, que los elegidos no siempre son los mejores. Es una pena, porque hay mucho valor en los votantes del PP, pero aquí parece que empieza seguir las consignas de sus enemigos de la izquierda. Cualquiera vale a condición de que sea fiel y súbdito.

Partido Popular, dirigentes de un partido que no se sabe qué ideología tiene, repito, al final de que te sirve ganar el mundo si pierdes el alma. Menos complejos, más energía, porque los españoles lo que piden es un Gobierno eficaz que ordene este país y que tome decisiones contundentes y que haga reformas que pide la sociedad española, tales como: despolitizar la Justicia, el Consejo General del Poder Judicial, el Tribunal Constitucional y la Fiscalía del Estado. Estas instituciones deben estar compuestas por personas de valía, al margen del signo político.

El Partido Popular, si tiene sentido de estado y quiere gobernar España por mucho tiempo, debe acometer reformas tales como: modificar la Ley Electoral, fundamental. Este país no puede estar gobernado por independentistas o filo etarras con Rufián u Otegui al frente. Blindar de una vez por todas el castellano como lengua oficial y obligatoriedad de enseñar la lengua de Cervantes en todas las Comunidades Autónomas. Que todos los españoles tengan las mismas oportunidades de empleo en cualquier comunidad Autónoma y que la lengua no sea un impedimento. Se debe revertir el delito de sedición, como hacen otros países europeos. Ir contra la indisoluble unidad de España debe ser penado con contundencia y que nadie lo pueda ni siquiera plantear. Esto lo pudo hace Rajoy que tenía mayoría absoluta y no lo hizo por debilidad y por el complejo del PP a ser criticado.

Vuelvo al principio. Si el PP no es contundente y no abandona sus complejos será flor de un día. Los acontecimientos no le favorecen nada. Lo que está haciendo en Murcia y Extremadura denota debilidad, falta de energía y de sentido. No se arrogue que Vox va en contra del feminismo. Esto del feminismo es una disculpa porque el feminismo, las mujeres, han sido y son feministas en toda la Historia, al menos, las europeas y las españolas. Partido Popular, espabila. Si sigues teniendo estos complejos, perderás la oportunidad de gobernar un país que está en manos de una izquierda extrema que no tiene sentido patrio y va en contra de todos los valores y principios constitucionales.

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