Diario de León

Diario de una aventura

De Bwindi a Ruwenzori

Queremos escalar el pico Margarita, de 5.109 metros de altura, pero para llegar a la base tenemos que atravesar una húmeda, fangosa y tupida selva

Publicado por
León

Creado:

Actualizado:

Un nuevo desafío está en marcha. Esta vez hemos volado hasta Uganda, un país maravilloso que se encuentra en medio de África, sin acceso al mar, en el interior de este bello continente. Tenemos que resolver innumerables trámites para obtener los permis os necesarios para nuestro siguiente Desafío Extremo: queremos escalar el pico Margarita, en la cordillera del Ruwenzori. Serán 5.109 metros de altura, pero para llegar tendremos que atravesar una húmeda, fangosa y tupida selva, después alcanzaremos la gran altitud y sorprendentemente, a pesar de estar a tan sólo 15 kilómetros del ecuador, ascenderemos por un glaciar lleno de grietas y después nos toparemos con las escarpadas, verticales y expuestas paredes de la parte final, donde la escalada será un mixto de nieve, hielo y roca. Otros de los problemas que nos encontraremos serán las fuertes lluvias, que prácticamente asolan este territorio, 350 días al año. Pero antes queremos conocer mejor este país y viajaremos al sur, frontera con Ruanda para adentrarnos en la Selva Impenetrable de Bwindi, como así se llama este parque nacional, donde habitan la mitad de los gorilas del Planeta y la otra mitad en Congo y Ruanda. Apenas son 700 ejemplares en total. Fueron catorce horas de pistas y carreteras infernales en un trasto de furgoneta, pero vimos de cerca las maravillas de este país. Como en muchas partes de África, la vida se encuentra junto a los caminos y carreteras. Uganda, especialmente, rebosa vida por todos los lados. Visitamos el lago Victoria, una de las fuentes del río Nilo. Es el segundo lago de agua dulce más grande del Planeta. Seguimos carretera abajo y la naturaleza cambia constantemente, de la jungla a la sabana. Nos hartamos de ver elefantes salvajes, impalas, gacelas, cebras, monos, etcéterea, junto a las pistas polvorientas por las que transitábamos-¦ en fin todo un espectáculo para la vista. ¡Qué bonito es África!.

Por fin y de noche llegamos al Parque Nacional de Bwindi. Nos recibe un ranger de la zona, entregamos los permisos que están todos correctos, y nos dan una explicación muy importante de nuestra actitud cuando estemos frente a ellos: hablar bajo, no acercarse a menos de siete metros, no mirarles a los ojos, nunca, jamás correr si creemos que nos atacan, nunca defenderse, y un montón más de normas.

Son animales en su estado natural, salvajes, que se mueven a su antojo por la jungla, así que el día será largo hasta dar con ellos. Caminamos durante horas por pendientes muy abruptas. Nuestra excitación es máxima, hasta que-¦ allí están los gorilas, plácidamente, comiendo hojas. Son una manada de nueve ejemplares, con un macho dominante de espalda plateada. Este ejemplar pesará unos 170 kilos, es enorme, y sus brazos miden unos dos metros de largo. Son como King-Kong. Para nuestra sorpresa, esta manada decide acercarse hasta tal punto que se pasean entre nosotros para observarnos y directamente nos tocan. Es asombroso, estamos junto a ellos y nada podemos hacer para respetar la norma de los siete metros: son ellos que han decidido pegarse literalmente a nuestros cuerpos y en ocasiones tocarnos. Es una sensación increíble, de las más intensas de nuestras vidas. Mañana pondremos rumbo al Parque Nacional del Ruwenzori. Os lo iremos contando y, dentro de poco, si visitáis nuestra página www.jesuscalleja.es sabréis en todo momento dónde estamos gracias a un identificador en tiempo real de posición por satélite.

tracking