Pobrecito ladrón
V iendo que a una infanta con duque le salen las sentencias a desgravar, medio país está furioso... el otro medio también, pero achanta la mui y no escupe sapos, los lame.
Escribirás algo de esto, ¿no?, me conminó un asiduo lector airado de los de verduguillo presto a descabellar toros estoqueados. Le dije un «susórdenes, mi brigada» que vale más que dar explicaciones, pero no pensaba escribir nada; el lector ya conoce todo alboroto y analista de galería que trajo el asunto, así que a todos les remito a la viñeta que El Roto publicó antes de conocer ese veredicto que el Urdanga se llevó a Suiza, patria querida, ay Suiza de mis doblones... ahí dibujó a un juez con su ropón solemne diciendo «La justicia es igual para todos, las sentencias, no »... y no hay más que decir.
Pero rindo promesa (y así complazco a ese lector) tras leer a Sostres en el periódico con el que se vende nuestro «colega matutino». Qué bárbaro diciendo «Es de una crueldad inenarrable que los delitos económicos se castiguen con la cárcel. En la prisión sólo tendrían que estar aquellas personas que representan en la calle un peligro físico para la sociedad, como los violentos, los asesinos, los terroristas, los violadores y los pederastas. Contra corruptos, defraudadores y similares hay penas mucho más productivas para la sociedad e igualmente disuasorias ... ¿le da pena el duque Empalmao porque somos la España truculenta, resentida y vengativa? ... pues claro, dice que carecemos de «la imaginación, la sensibilidad y la humanidad para entender la humillación que supone entrar en una cárcel, y la atroz monstruosidad -mucho peor que cualquier delito, salvo los físicos- que es privar a un hombre de su libertad ».
Pero no sólo él piensa así... ¿no lo hace un ministro segándoles a sus fiscales anticorrupción la hierba bajo la toga?... es el efecto Trump... ¿y dice que es cruel la cárcel para el que robó tanfácil al común y, además, se mostró después chulo e insolente?... ¿pero no tuvo Sostres un padre que le dijera «si un día vienen diciéndome que te pillaron robando, te mato»? porque entonces robar era lo peor... pero ¡pobrecito mi ladrón... sólo robó a la gente pobre!...