«A mí lo que me da miedo es la vida y sus decisiones, no los ochomiles»

león

«Yo soy una tía normal que sube montañas de 8.000 metros». Así se definió en León Edurne Pasabán. Su descripción, que incluso le sorprendió a ella misma, provocó una carcajada en el salón de actos de la Obra Social de Caja España, donde la alpinista dio ayer una conferencia salpicada de confesiones y buen humor.

Antes que ella ya había deleitado a los asistentes con sus ocurrencias el montañero y aventurero leonés Jesús Calleja, protagonista de uno de los programas de más exito de la cadena de televisión Cuatro. Primero hizo desfilar a Pasabán por el escenario como si de una modelo se tratara, luego espetó «mirad qué pedazo mujer os hemos traído» y luego, ya más serio, dijo que Edurne Pasabán era la mejor escaladora de ochomiles de toda la historia, «además de una persona estupenda».

Diez minutos antes, Edurne Pasabán llegó corriendo, estresada, había perdido el móvil, se había manchado la ropa buscándolo en el coche, le llamaba su madre, le pidieron que fuera corriendo a visionar el DVD, saludó a cuantos se acercaron a ella y respondió a un montón de preguntas.

Viéndola así se comprende por qué asegura que en un ochomil «hay paz».

«Allí arriba uno es consciente de la vida tan estresada que llevamos, de lo que sufrimos, de cuánto nos preocupamos, y más ahora en medio de esta crisis económica que está afectando a tanta gente».

En la cima de una montaña, Edurne Pasabán sólo siente tranquilidad. Y que el tiempo se ha detenido. Aunque en realidad cuando lo cuenta, queda palpable que allí arriba también hay carreras.

«Me doy cuenta de lo que he visto cuando ya estoy abajo. Hay prisa por llegar y sobre todo por bajar», dice. Con la misma rapidez, encuentra una respuesta para definir qué es el miedo.

«A mí lo que me da miedo es la vida y sus decisiones, equivocarme, no saber qué camino tomar, no los ochomiles»

Pasabán es una de las tres alpinistas que aspira a convertirse en la primera mujer del mundo en escalar las 14 montañas más altas del mundo. Las otras dos son la italiana Nives Meroi y la austriaca Gerlinde Kaltenbrunner. Todas han llegado a la cima de once ochomiles . A la española le quedan el Shisha Pangma, el Kangchenjunga y el Annapurna. Como dijo Jesús Calleja: «Casi nada».

«El reto es subir los 14 ochomiles y, claro, me encantaría ser la primera en hacerlo. Pero si soy la segunda también será un éxito. Y no dejaré de intentarlo por ello».

Quedó claro ayer en León. Eso y que, como aseguró Calleja, Edurne Pasabán es una mujer excepcional.