Diario de León

La organización nacional aboga por evaluar a todos los niños de Infantil

Las asociaciones de superdotados se quejan de la falta de recursos

Alicia Rodríguez, presidenta de Aest: «Lo único que se hace es desarrollar experiencias piloto»

Un niño superdotado se dirige a su aula en la Facultad de Matemáticas

Un niño superdotado se dirige a su aula en la Facultad de Matemáticas

Publicado por
Goretti Cortina - redacción
León

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La presidenta de la Asociación Española para Superdotados y con Talento (Aest), Alicia Rodríguez Díaz-Concha, manifestó -en una entrevista a www.consumer.es - la falta de recursos para los superdotados: «No existe una verdadera voluntad en la política educativa, y prueba de ello es que no se destinan recursos para este colectivo». Para la máxima representante de la asociación, desde su reconocimiento oficial por el Ministerio de Educación y Ciencia (MEC) en 1995, «no se ha avanzado nada». «Son muchos los impedimentos que nos encontramos los padres para realizar diagnósticos y en consecuencia, recibir la atención necesaria», denunció Rodríguez. Y puntualizó que «lo único que se hace es poner parches, desarrollar experiencias piloto». Entre las reivindicaciones de la Aest a Educación y Ciencia se encuentra la propuesta de evaluar a todos los alumnos de Educación Infantil -los especialistas consideran que una vez cumplidos los tres años se pude decir si un niño es o no superdotado-. «Por el momento, son los padres y las madres quienes dan la alarma, y en ocasiones somos censurados por ello, como si tratásemos de descubrir algo que no existe», concretó la presidenta de Aest. Según las estadísticas del MEC, en España hay 2.648 escolares identificados, aunque el mismo Ministerio cifra en 300.000 a los alumnos potenciales superdotados. En relación a los grandes mitos que suelen rodear a los superdotados, Alicia Rodríguez explica que, para la sociedad los superdotados «tienen que ser brillantes, perfectos en todo, que no precisan nada, que se pasan el tiempo estudiando, que no tienen sentido del humor, incluso que físicamente presentan un aspecto grotesco». Para diagnosticar sobredotación intelectual es necesario que un profesional realice una combinación de pruebas, test específicos y científicos que tienen como objeto descubrir altas capacidades. «Hay que tener en cuenta que la persona arrastra un pesado bagaje de malas experiencias hasta que es evaluada. Por eso, debe hacerse con propiedad», aconsejó Rodríguez.

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