Defensa gastará 8 millones para calentar la base Conde de Gazola

El Ministerio de Defensa invertirá seis millones de euros en la construcción de la central de biomasa de la base Conde de Gazola , en Ferral del Bernesga,  y la mejora envolvente de los edificios que integran este acuartelamiento del Ejército de Tierra. Defensa acaba de licitar la obra por un importe de 8,4 millones de euros con el objetivo de  unificar en una central las 46 calderas de propano y gasóleo, además de añadir las envolventes y la iluminación de la base lo que permitirá reducir las emisiones un 30%.

El anuncio de la licitación llega después de que el Consejo de Ministros diera luz verde a más de 750 millones para modernizar la artillería que depende, precisamente, del Mando de Artillería de Campa, con su cuartel general en la base Conde de Gazola.

La recuperación de la capacidad operativa con los lanzacohetes, con 714 millones de euros para el Ralca 63 —ubicado en el acuertalamiento de Santocildes en Astorga— se lleva gran parte del importe, que completarán la adquisición de proyectiles «con precisión nunca vista», guiados por coordenadas, y espoletas para mejorar esa precisión. 

Ese importe, ligado a la modernización del Ejército ante las exigencias de inversión demandada por la Otan, se suma al plan de austeridad del Ministerio de Defensa que busca además de reducir el gasto público, fomentar la concienciación del uso racional de los recursos públicos por parte del personal militar. 

Actualmente, en la base Conde de Gazola trabajan cerca de 1.400 militares, repartidos en las diferentes unidades, incluido el quinto batallón de la UME, que además este año incorporará la nueva unidad de drones a finales de este año, la Udrume, con un centenar de militares más.

A pesar de que la extensión de la base supera las dos mil hectáreas,  aunque los edificios se concentran en 46 de ellas, son un centenar los inmuebles que albergan las dependencias militares, en las que hay instaladas 46 calderas, de las que 30 son de gasóleo y otras 16 de propano y, a mayores, existe ya en uno de esos edificios una caldera de biomasa. El objetivo de Defensa es dar calor y servicio de agua caliente a los edificios que integran la base. 

El proyecto incluye la construcción de un máximo de cuatro calderas y que la instalación tendrán capacidad para suministrar un 200% de lo requerido en los cálculos de demanda, que contempla, por ejemplo, el hecho de horas punta de suministro de agua caliente con motivo de las duchas.

La instalación contará con un sistema de generación de calor de respaldo con gas y se estudiará cómo acumular agua para cuando sea necesario un uso intensivo, además, tampoco se descarta la instalación de paneles solares para reducir el consumo de astillas. La potencia actual que consiguen las 47 calderas es de 7.090,5 kilowatios, energía que deberá alcanzar al menos el nuevo sistema, y en tan sólo siete edificios se contempla la combinación de agua caliente y calefacción. 

Para completar la mejora de la eficiencia energética de la base Conde de Gazola, el pliego de prescripciones técnicas también incluye actuar en la envolvente térmica de algunos edificios con trabajos como las fachadas, la carpintería —con la sustitución y mejora de todas las ventanas además del acristalamiento—, los solados y las cubiertas de los edificios.

El objetivo que se plantea el ministerio es conseguir bajar «al menos una letra» la consideración energética actual con estas actuaciones y al menos un 30% del consumo de energía.

A todo ello suma la iluminación, teniendo en cuenta que los edificios dispondrán de instalaciones adecuadas a las necesidades de sus usuarios y a la vez eficaces energéticamente.

En este sentido, se contempla un sistema de control que permita ajustar su funcionamiento a la ocupación real de la zona y un sistema de regulación que optimice el aprovechamiento de la luz natural en áreas  que reúnan unas determinadas condiciones mediante el aprovechamiento de la luz solar y las condiciones de exposición.